Víctor Schillaci y los hermanos Martín y Cristian Lanatta fueron trasladados desde Ezeiza a los Tribunales en medio de un fuerte despliegue de seguridad, para enfrentar el primer día del debate en el que está previsto que participen al menos 100 testigos y que se extendería hasta fines de este mismo mes.
Martín Lanatta declaró que tenían más miedo adentro de la cárcel que afuera.
Asimismo aseguró que en la causa por el triple crimen de General Rodríguez, donde fueron asesinados Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina, hubo testigos que "fueron apretados".
"Llevamos más de 10 años de pelea por la causa del triple crimen y la causa está por dar un vuelco", señaló el condenado sin dar mayores precisiones al respecto.
"Estamos por pedir el juicio político del fiscal, estamos aportando pruebas para eso", manifestó Lanatta.
Tras las críticas al fiscal, Lanatta se dedicó a elogiar al juez Torres quien lo interrumpió para señalar que "si piensa que por adularme va a conseguir una modificación en la causa, está equivocado".
Posteriormente el imputado dijo que se sentías mal, por lo que debió suspenderse el juicio.
Al finalizar la primera jornada de juicio tanto los hermanos Lanatta como Schillaci fueron trasladados de regreso al penal de máxima seguridad de Ezeiza donde se encuentran alojados desde que fueran recapturados tras la fuga en 2015.
Se trata del primero de los cuatro procesos en su contra y el único que tiene fecha definida hasta el momento. El segundo juicio también será en La Plata, por el ataque a tiros a dos policías en Ranchos y los otros dos se llevarán a cabo en nuestra provincia, uno por tirotearse con Gendarmería Nacional en la zona rural entre Gessler y San Carlos y el último por otros delitos cometidos en distintos puntos de la provincia de Santa Fe mientras estuvieron prófugos.
Recordemos que los hermanos Lanatta y Schillci cumplían su pena en el sector Sanidad de la Unidad Penitenciaria 30, cuando consiguieron evadirse la madrugada del 27 de diciembre de 2015.
El trío aprovechó el momento en que ingresó un guardia para hacer el recuento habitual. Lo golpearon, lo ataron de pies y manos, lo amordazaron y le robaron las llaves de un Fiat 128, en el que escaparon del penal. En la calle los esperaba una 4x4 y con la ayuda de terceros, dieron inicio a la triple fuga.
Fueron 13 días de locura hasta que cayeron en la localiudad de Cayastá, provincia de Santa Fe, en enero de 2016. Con ellos también será juzgada Susana Elvira Martínez, la suegra de Christian Lanatta, a quien la fiscal acusa de haberles dado dinero a los prófugos el mismo día de la escaparon en su casa de Berazategui y también de haberles facilitado una camioneta el 31 de diciembre que usaron para seguir la huída.
