La Corte Suprema dejó sin efecto la sentencia que había declarado la prescripción de la causa por la tragedia del Colegio Ecos, de Villa Crespo, y ordenó dictar un nuevo pronunciamiento, indicó el Centro de Información Judicial (CIJ) en su página web.

La causa –que se abrió a partir del accidente en la ruta nacional 11 en el norte de Santa Fe– había sido declarada prescripta por la Suprema Corte de Santa Fe, pese a la condena que recaía sobre el conductor del micro en el que iban las víctimas. Pero ahora el máximo tribunal judicial de la Nación aceptó hacer lugar a un recurso extraordinario que habían presentado los familiares de las víctimas, con el apoyo de la Procuración General.

En diálogo con LT9, Diego Molina, ex esposo de Mariana Boyé, la docente que fue una de las víctimas del accidente, sostuvo que "se abre una esperanza con esta sentencia, no puede ser que se diga que acá no pasó nada".

"Nosotros no podemos ser querellantes en la causa así que estamos a la espera de lo que haga la justicia santafesina. Sólo pedimos que haya un fallo, no puede ser que se diga acá no pasó nada por el sólo paso del tiempo", agregó.

"Fue un golpe muy duro porque que esté la causa dormida o cajoneada es una falta de respeto, y ese es el punto, genera indignación saber que estuvo manoseada. No puede quedar impune, murieron 9 alumnos y mi esposa, esto fue un hecho grave, no puede quedar olvidado. Después de la feria judicial, calculamos que empezaremos a gestionar qué hacer para seguir los pasos y esto tenga un fallo", indicó.

El accidente ocurrió el 8 de octubre de 2006, cerca del kilómetro 689 de la ruta nacional nº 11. Allí perdieron la vida doce personas y resultaron heridas cerca de cuarenta.

El 24 de octubre de 2011, el Juzgado de Primera Instancia de Distrito en lo Penal de Instrucción de Reconquista condenó al chofer Oscar Eduardo Atamañuk a la pena de tres años de prisión de ejecución condicional e inhabilitación para conducir vehículos por el término de siete años "por encontrarlo penalmente responsable de homicidio culposo múltiple agravado y lesiones culposas agravadas múltiples en concurso ideal".

En noviembre de 2012 se anuló el fallo, cuando la Cámara de Apelaciones de Rafaela hizo lugar a uno de los planteos de nulidad de la defensa. La causa fue reenviada para un nuevo fallo y el 22 de julio de 2013 el Juzgado de Menores de Reconquista condenó a Atamañuk a dos años y seis meses de prisión. Sin embargo, el 4 de diciembre del año siguiente la Cámara de Apelación en lo Penal de Rafaela revocó la condena y dictó el sobreseimiento por prescripción de la acción.