Una gran cantidad de mujeres marchó cerca de las 17 desde el Puente Colgante hasta la Plaza de Mayo para reclamar por el fin de la violencia machista y la igualdad de género. La convocatoria principal la realizó la Mesa Ni una menos, llamado al cual respondieron decenas de espacios feministas, sindicatos y asociaciones civiles y políticas. 

En la caravana se pudo observar personas de a pie, así como también en numerosos autos, motos y bicicletas.

La concentración en la capital provincial denunció sonoramente el creciente número de femicidios y la impunidad que suele decir presente, y toda una serie de violencias de géneros que afectan a todas las mujeres: en lo que va del año ya son unos 50 los femicidios ocurridos en el país; además, 3 de cada 10 víctimas de femicidios habían realizado antes de ser asesinadas la denuncia contra sus agresores. Según el Indec, se ampliaron de manera preocupante las brechas de desigualdad entre hombres, mujeres y disidencias durante la pandemia.

La protesta tuvo en cuenta medidas sanitarias para prevenir los contagios de coronavirus y se repitió en todas las principales ciudades del país.