Enviá tu WHATSAPP a la radio

 En vivo

Radio LT9

Es Viral

El emotivo discurso del estudiante que agradeció a los ladrones que casi lo matan

A Pablo Quiavea le dispararon en la cabeza y con mucho esfuerzo logró recuperarse. En la fiesta de graduación conmovió con sus palabras.
VIERNES 14 DE DICIEMBRE DE 2018

Cuatro tipos lo rodearon. En ese instante Pablo Quiavetta se quedó congelado. Estaba reunido con amigos en el Parque General San Martín de la ciudad de Mendoza y lo que hasta hace minutos era un momento divertido ahora se había convertido en una escena espantosa. Uno de los hombres que aparecieron intempestivamente sacó un arma y en menos de un segundo le dio a Pablo un vuelco inesperado para su vida.

Era la madrugada del 4 de abril de 2013 y desde entonces esa fecha se convirtió en una suerte de segundo cumpleaños para Quiavetta. Se escuchó un disparo y Pablo cayó vencido. La bala se le alojó en la parte izquierda del cerebro y lo dejó en coma. Estuvo 50 días inconsciente, fue operado dos veces en la cabeza y una más en el hígado.

Por aquellos días Pablo trabajaba como perforista en una empresa minera y llevaba tres meses de casado con Siomara Astudillo. Juntos habían planificado el viaje a Brasil que estaban a punto de realizar. Era la previa perfecta para transitar esa ansiosa espera del embarazo que Siomara llevaba hacía cinco meses en la panza.

Su familia no puede recordar el hecho sin pensar que fue un milagro que Pablo pudiera despertar tras semejante ataque. Fue lento, pero poco a poco pudo recuperarse. Pasó de terapia intensiva a una sala común. De la camilla a la silla de ruegas y finalmente volvió a caminar. Aunque con dificultad y esfuerzo, también aprendió a hablar nuevamente y entonces decidió ponerse a estudiar. Ya era otro. Sus prioridades habían cambiado completamente.

Cinco años después, el pasado 29 de noviembre, el mendocino que actualmente tiene 33 años se recibió como Técnico universitario en gestión de empresas, de la UNCuyo. Y conmovió a todos cuando, en medio de la ceremonia de entrega de diplomas, subió al escenario, tomó el micrófono y le agradeció a los delincuentes que casi lo matan porque "me hicieron entender que tengo mucho para dar, que tengo mucho para agradecer".

Frente a sus familiares, compañeros, profesores y directivos de la facultad, Pablo conmovió con un mensaje de paz: "Me dieron a entender que tengo mucho para dar y mucho para agradecer y que esta vida es hermosa. Todo el tiempo nos da una pruebita más por la que luchar, un momento más para salir adelante. Creo que el valor del hombre no está en lo que posee y mucho menos en poseer un arma, creo que el valor está en saber que hacer con un lápiz y un papel".

"Cuando empecé a estudiar caminaba mal, hablaba mal, no se me entendía nada. Hoy les digo a todos que seamos dignos de vivir esta vida", agregó con emoción y cerró con una contundente frase: "Tratemos de no corromper nuestra alma con malos tratos. Antes de pensar en un 'no puedo', por lo menos hagan el intento".




NOTICIAS RELACIONADAS


MAS LEÍDAS

ONDA 9 S.A - 4 de Enero 2153 - (0342) 410 9999 3000 Santa Fe Argentina
Suscribite a nuestro Newsletter