El grupo yihadista nigeriano Boko Haram se ha atribuido el secuestro de más de 300 estudiantes de una escuela de educación secundaria atacada el pasado viernes en el estado de Katsina, en el noroeste de Nigeria.

"Nosotros estamos detrás de lo que ocurrió en Katsina", ha afirmado el líder de Boko Haram, Abubakar Shekau, en un mensaje de audio publicado por el portal informativo nigeriano HumAngle.

"Se hizo para promover el islam y desalentar las prácticas no islámicas, ya que la educación occidental no es el tipo de educación permitido por Alá y su Santo Profeta", ha añadido Shekau.

Este ataque es la primera gran operación del grupo en el noroeste del país, donde hasta ahora se había limitado a emboscadas a agentes de seguridad y secuestros a menor escala para pedir un rescate, mientras en el noreste sí había realizado secuestros masivos.

Hombres armados atacaron en la noche del viernes la Escuela de Secundaria de Ciencias del Gobierno, un colegio masculino situado en la ciudad de Kankara. En la escuela había en total 839 estudiantes, 333 de los cuales están desaparecidos y supuestamente en manos de Boko Haram.

El gobernador de Katsina, Aminu Bello Masari, se reunió ayer lunes con el presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari. El gobernador ha afirmado que los secuestradores han establecido contacto y que ya se estaba discutiendo sobre la liberación de los chicos. Sin embargo, fuentes de Boko Haram han asegurado a HumAngle que ni han hecho demandas ni se han fijado condiciones para la liberación.

Boko Haram, que significa "la educación no islámica es pecado", lucha por imponer un Estado de corte islámico en Nigeria, país de mayoría musulmana en el norte y predominantemente cristiano en el sur. Una de sus armas es el secuestro.

 En 2018, el grupo secuestró y luego liberó a más de un centenar de niñas en Dapchi (noreste). El 2014, secuestró a más de 200 chicas en Chibok, un suceso que conmocionó al mundo.

Seis años después, algunas habían huido y otras han sido intercambiadas por prisioneros, pero aún se desconoce el paradero de 112 de ellas. Algunas de las niñas que pudieron regresar lo hicieron embarazadas o con hijos, tras haber sido violadas.

En las redes sociales, algunos nigerianos usan ya la etiqueta #BringBackOurBoys ("Traed de vuelta a nuestros chicos"), una referencia a la campaña internacional "Traed de vuelta a nuestras chicas" que se organizó con motivo de los sucesos de Chibok.   (REUTERS/RTVE)