"No se trata de una ideología sino de una
epidemia viral que ataca por igual a países desarrollados y atrasados,
adoptando para cada caso máscaras diversas, de izquierdismo en el Tercer
Mundo y de derechismo en el primero", expresó el premio Nobel de
Literatura en el texto publicado por el diario español "El País".
En
él, reflexiona sobre el comunismo como una "ideología residual" que "ya
no es el enemigo principal de la democracia liberal". "A diferencia de
lo que muchos creíamos, que la desaparición del comunismo reforzaría la
democracia liberal y la extendería por el mundo, ha surgido la amenaza
populista", destaca.
"Ni
siquiera los países de más arraigadas tradiciones democráticas, como
Reino Unido, Francia, Holanda y Estados Unidos están vacunados contra
esta enfermedad", advierte, recordando el triunfo del "Brexit", la
llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y los buenos datos en las
encuestas electorales de los partidos de Geert Wilders y Marine Le Pen
en Holanda y en Francia, respectivamente.
Vargas
Llosa también dirige la mirada a América Latina. "Gobiernos como los de
Rafael Correa en Ecuador, el comandante Daniel Ortega en Nicaragua y
Evo Morales en Bolivia, se jactan de ser antiimperialistas y
socialistas, pero, en verdad, son la encarnación misma del populismo",
dice.
El
autor de "La ciudad y los perros" advierte de que Trump podría, como
ocurrió en estos países, tomar medidas "que restrinjan y desnaturalicen
la libertad de expresión", en sus palabras.
"¿Qué
es el populismo? Ante todo, la política irresponsable y demagógica de
unos gobernantes que no vacilan en sacrificar el futuro de una sociedad
por un presente efímero", observa Vargas Llosa, quien destaca "el
nacionalismo" y "el racismo" como ingredientes fundamentales.
"Una de
las dificultades mayores para combatirlo es que apela a los instintos
más acendrados en los seres humanos (...) Eso se advierte de manera
dramática en el Estados Unidos de hoy", señala.