Este viernes, en la sala Zapata Gollán del Concejo Municipal concejales abordaron junto a médicos, bioquímicos y facultativos en problemas toxicológicos, el proyecto de Ordenanza –autoría del concejal Ignacio Martínez Kerz - que solicita modificar el Reglamento General de Tránsito de la ciudad –Ordenanza 10.017- en los casos de comprobarse estado de intoxicación alcohólica al volante durante la conducción.

En la reunión de trabajo estuvieron presentes los concejales Alejandra Obeid, Leandro González, Marcela Aeberhard, Franco Ponce de León, Carlos Suárez, Marcelo Ponce, Luciana Ceresola, además el autor de la iniciativa Ignacio Martínez Kerz.

Del encuentro participó, el Dr. Juan Pablo Poletti, Director del Hospital José María Cullen, Carlos Mastandrea –bioquímico-, Jefe del Departamento de Toxicología del Hospital José María Cullen; el Dr. Guillermo Kerz, Decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Católica de Santa Fe, el Dr. Juan Carlos Langhi, Jefe de Neuro Toxicología del Hospital Cullen, el Dr. Guillermo Micheletti, Coordinador Médico de la pista de examen del Parque Garay en representación del Colegio de Médicos y el Dr. Félix Bertorello, del Departamento de Control de la Salud del Concejo Municipal.

El proyecto

La modificación propuesta por Martínez Kerz –inciso b. del art.65 de la ordenanza de tránsito estipula que “se entenderá que una persona se encuentra en estado de intoxicación alcohólica cuando la medición alcoholimétrica detecte la presencia de alcohol en sangre, cualquiera sea su concentración por litro.”

“De resultar positiva la medición alcoholimétrica, sin importar los valores que arroje, se considerará como alcoholemia peligrosa y se actuará conforme lo establece la normativa vigente para estos casos. Sin embargo, cuando la medición alcoholimétrica no supere las dos décimas de gramo por litro (0,2 gr/l) de sangre, no se aplicarán sanciones administrativas”.

“Los dispositivos de medición alcoholimétrica no son perfectos. Hay casos de conductores que bebieron alcohol y, sin embargo, el control de alcoholemia les da negativo, porque los dispositivos están descalibrados. Entonces, los 0,2 gr/l están contemplados como un margen de error, no de tolerancia”, aclaró el concejal.

El proyecto de Martínez Kerz (PJ-Santa Fe es una sola), es acompañado en su firma por los concejales Sebastián Pignata y Lucas Maguid; ya pasó el estudio de la Comisión de Desarrollo Social. Ahora, con el proyecto en la Comisión de Gobierno, se espera que obtenga dictamen definitivo en las próximas semanas, para luego tratarse en el recinto.

Según señaló la concejala Alejandra Obeid, “los especialistas médicos que estuvieron hoy presentes son los que suman el aporte más importante mas allá de lo técnico legislativo. Con este proyecto queremos erradicar la especulación de `me tome dos vasitos de cerveza, un vasito de vino´, que es la tolerancia que tiene el control de alcoholemia hoy en día. Queremos eliminar estos hábitos – y allí es donde se cruza con el proyecto de conductor responsable- y cuidar a toda la sociedad, tanto a los que conducen como los que pueden verse perjudicados ante una persona que esta alcoholizada al volante”.

A su turno, Martínez Kerz señaló que “tuvimos la palabra de quienes son receptores de la mayoría de los accidentes de la ciudad, nos hicimos de estadísticas muy interesantes. Vamos a esperar una devolución del Colegio de Médicos, del Hospital Cullen, del área de toxicología, del área de accidentología, también participó la Universidad Católica de Santa Fe, todos especialistas que recepcionaron de muy buena manera este proyecto. Esperamos que esta primera etapa tenga un impacto local, que luego se transforme en un impacto regional y luego rija en toda la provincia. Las experiencias en otras ciudades y provincias han sido muy positivas en reducción de accidentes. Seguramente vamos a estar incorporando por recomendación de los médicos que participaron de la reunión, algunas modificaciones al protocolo de seguridad vial que vamos a estar ingresando con nuestro bloque en pocas semanas”.

La palabra de los médicos especialistas

Dr. Juan Pablo Poletti, Director del Hospital José María Cullen “Nos llevamos el proyecto para analizarlo. A primera vista, totalmente de acuerdo. Sumamente alentador que salga un proyecto de estas características que puedan disminuir la tasa de accidentes de tránsito, que ya de por sí por el solo hecho de las rutas, los accidentes, las imprudencias, si le sumamos el alcohol son manifiestos, son diarios y con una estadística sumamente preocupante. En este sentido, que podamos disminuir un factor tan importante en la provocación de accidentes como es el alcohol positivo, estamos totalmente de acuerdo y vinimos a escuchar para poder apoyar este proyecto que esperamos que salga”.

Según el director del Hospital Cullen, “la sociedad debe comprender que el que toma no debe manejar. Falta tomar conciencia del peligro que significa conducir un vehículo, ya sea de cuatro o dos ruedas. Hoy vemos a diario, en todas las calles de la ciudad, cuatro o cinco personas en una misma moto, gente hablando por teléfono mientras maneja, gente que toma mate, que va escribiendo mensajes; sinceramente no medimos el peligro de que el accidente puede estar en la esquina de cualquier calle de la ciudad; lo podemos provocar nosotros o tenemos que estar atentos a que los provoque un tercero, los ciclistas que entran en contra mano, por ejemplo. Son cosas culturales que tenemos que pensar cada uno en nuestro interior, durante el día la cantidad de infracciones que cometemos y no nos damos cuenta cada vez que salimos de casa hasta que volvemos, muchas veces sin darnos cuenta”.

“Las cifras en general se mantienen, tenemos un promedio entre 12 a 17 accidentes por día que ingresan al hospital, y no son todos los ingresos de la ciudad, porque muchos van al Iturraspe o al Mira y López y esos accidentes menores no llegan a la estadística. De todos modos hablamos de 15 personas que ingresan lesionados al hospital y que un 30-40 por ciento son accidentes graves con meses de internación, con secuelas y muerte. Tenemos que tomar conciencia. Saludo que se haya dado un primer paso que es el alcohol que sabemos que es potencialmente peligroso para provocar accidentes de tránsito”.

Bioquímico Carlos Mastandrea, Jefe del Departamento de Toxicología del Hospital José María Cullen: “El proyecto es una medida muy interesante; la apruebo totalmente porque uno desde su lugar de trabajo en el Hospital Cullen, vemos emergencias, y en la mayoría de los accidentados, vemos una gran incidencia, una gran problemática que relaciona los accidentes al consumo de alcohol y drogas. Por eso me parece un proyecto muy bueno, muy ambicioso que necesita la colaboración de los profesionales de la salud, y apoyar esta idea. Me parece muy importante para que la gente, la comunidad, lo adopte como una costumbre sana; de que si alguien va a consumir en un determinado evento bebidas alcohólicas, y después va a salir a la calle a conducir sea responsable y dé el volante a una persona que no haya consumido”.

Dr. Guillermo Micheletti, Coordinador Médico de la pista de examen para conductores en el Parque Garay: “Todo lo que podamos hacer para evitar esta epidemia que son los accidentes de tránsito que tenemos en el país es muy beneficioso. Cualquier dosis de alcohol deprime nuestras respuestas ante situaciones de una urgencia; así que creo que del mismo modo que se está adoptando en otras ciudades y países; la conducta de alcohol cero, va a redundar en un beneficio y un mayor control. Es muy difícil hasta cuanto, porque depende de cada persona, va a ser nociva esa dosis de alcohol, por eso es muy positivo que la gente se acostumbre a que el conduce no tome nada. Hablo de epidemia porque en los valores en que se presentan en este país, se toma ya directamente como epidemia de accidentes de tránsito. El número de casos focalizados justifica hablar de epidemia”.

Dr. Guillermo Kerz, Decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Católica de Santa Fe: “La epidemia de accidentes de tránsito es un problema de salud pública, y esto es lo que sucede en Argentina; y otro tema es el alcohol. Esta ordenanza es de protección de la salud, es decir de prevención primaria para evitar que haya accidentes. Avanzar sobre esto, es avanzar hacia el primer mundo, donde las acciones de prevención primaria y de protección de la salud son concretas, y este proyecto es una acción concreta de evitar toda clase de alcohol antes de manejar. El alcohol siempre es un problema al volante, y no lo es solo para la persona que maneja, sino también para terceros. Me parece que sería una ordenanza de un gran impacto que no solo va a tener a nivel de salud pública, sino también como ordenanza educativa de pensar no solamente en la salud de uno mismo, sino también pensar la salud de los otros. Quedamos en que cada uno se lleva el proyecto y naturalmente el Concejo está abierto a que demos opiniones; si habría que cambiar algo podemos hacerlo, así que ahora viene una fase de profundización y sugerencia en lo que vimos que está muy bien pero se pueden hacer sugerencias para poder mejorarlo aún mas. Es un trabajo colectivo y solidario”.