La situación productiva y laboral en toda la provincia de Santa Fe es, según la evaluación del gobierno provincial, de los gremios y de las empresas, muy preocupante. Las firmas Electrolux, General Motors, Honda Guerrero, Helvética de Cañada de Gómez, Síntesis Química de Fighiera, Vasalli de Firmat, Metalsur de Villa Gobernador Gálvez, entre otras, fueron y son noticia por adelantamiento de vacaciones, suspensiones o directamente el cese de la producción, dejando a cientos de trabajadores y sus familias en condiciones de incertidumbre, angustia y precariedad.
Los sectores de electrodomésticos de línea blanca, las carroceras, los textiles y los fabricantes de calzado son los más afectados por esta coyuntura. Y atribuyen las causas a la “dolarización de los insumos”, las “subas en las tarifas de todos los servicios” y fundamentalmente “la caída de las ventas” ante la pérdida de poder adquisitivo por parte de los consumidores.
La fábrica rosarina de heladeras Electrolux licenció a sus casi 1.000 empleados por todo el mes de octubre por “la caída de las ventas y el exceso de stock almacenado”, según detallaron los propietarios.
La histórica firma de acoplados Helvética, en Cañada de Gómez, decidió parar su producción y cerrar la planta hasta fin de año, debido a un derrumbe en las ventas de 80 a 90 por ciento, suspendiendo a sus 90 empleados y pagándoles la mitad del sueldo.
General Motors, ya comenzó con su planificación de suspensiones rotativas, diseñado por directivos y el gremio Smata hasta fin de año, con el fin de evitar despidos. Los 1.400 operarios cobrarán el 70% de sus sueldos.
Un acuerdo similar se selló en la industria de carrocerías de colectivos Metalsur, de Villa Gobernador Gálvez, que licenciará en forma rotativa a todo su personal (400 trabajadores) al menos hasta el próximo 12 de octubre, a cambio de la garantía de estabilidad para esos puestos de trabajo.
El Fighiera, los 40 empleados de la Química Síntesis viven desde hace varios meses una situación de desesperación porque no cobran un peso y no tienen ninguna respuesta de los dueños.
Otro caso señero para la región es el de la fábrica de cosechadoras Vasalli de Firmat, cuyos obreros vienen soportando una situación penosa desde el año pasado cuando dejaron de cobrar sus haberes con regularidad.
En la fábrica de motos Honda Guerrero de San Lorenzo, los 200 empleados de la planta continúan con la lucha para que la reestructuración que anunció la empresa, y que motivó su cierre y reapertura meses atrás, no se lleve puesta las fuentes laborales.
Esto se suma a la crisis en muchos casos terminal de cientos de Pymes santafesinas que no logran equilibrar los costos de producción, los incrementos en las tarifas de los servicios, los precios de los alquileres y el pago de sueldos con las ventas.
La ministra de Producción de Santa Fe Alicia Ciciliani confirmó que hay “entre 180 y 200 empresas que están en proceso preventivo de crisis” en la provincia y que esa coyuntura “afecta a 15 mil trabajadores”. “Los números son muy impactantes”, reconoció.
Ciciliani destacó que existen encuentros diarios con los sectores afectados: “Lo charlamos con empresarios, con las cámaras; estamos muy preocupados y constantemente coordinando audiencias en los ministerios de Trabajo y Producción”.
En ese contexto, la funcionaria rescató “el enorme esfuerzo que están haciendo empresarios y sindicatos para que esta situación no se torne más difícil aún”.
La ministra también admitió problemas laborales en los sectores de panaderos, frigoríficos y pescadores. “El sector más complicado es la pequeña industria que está vinculada al mercado interno”, remató.