Eran las 7 de la mañana del martes 13, llovía y Liliana Coronel, una policía que trabaja en la comisaría de Totoras comenzó a hacer dedo para llegar hasta su casa en San Genaro. Esto que es habituel tenía otros condimentos esta vez.
Su hija se había comunicado para avisarle que estaba ingresando agua en su casa. Así que con esa preocupación Liliana salió a la ruta y se puso a caminar. Al llegar al cruce de la RN34 la provincial 91, hizo dedo y Pablo, un camionero que viajaba hacia el norte, decidió acercarla a su casa.
Preocupada por la situación que le habíainformado su hija, Liliana, junto a Pablo, también santafesino, domiciliado en Cañada Rosquín, comenzaron a desandar los 30 kilómetros para llegar a San Genaro, sin saber qué les iba a deparar el destino minutos más tarde.
Cuando llegaron a bordo del camión a la altura del arroyo el Chupino, que se encuentra entre la localidad de Clason y San Genaro, en el departamento Iriondo y a unos 150 kilómetros al sur de la ciudad de Santa Fe, observaron un importante caudal de agua que desbordaba del arroyo e impedía el paso de una camioneta.
Ante las circunstancias, la suboficial le pidió al camionero detenerse para ver si necesitaban algo y grande fue la sorpresa al saber que en el interior del vehículo estaba la mujer con trabajo de parto y su marido desesperado pidiendo ayuda para poder atravesar la masa de agua y llegar a la clínica de la ciudad de San Genaro, para dar a luz a una beba.
Cristina Abba y su marido ya habían dado aviso a los bomberos de la situación, quienes los esperaban del otro lado del puente para hacer el traslado.
Liliana la mujer policía le pidió a Pablo el camionero trasladar a la mujer para que llegue a la clínica. El hombre accedió. Después de ayudar a la parturienta para subir a la cabina del camión, emprendieron el viaje. Atravesar la zona inundada no fue fácil.
Liliana contó por LT9 que a esa altura estaba tan preocupada por ayudar en el nacimiento que hasta olvidó el problema que había en su casa donde ingresaba el agua de lluvia.
El camión les permitió llegar del otro lado del puente donde los bomberos y una ambulancia esperaban a la mujer, que fue trasladada hasta la clínica y finalmente, a las 10 y por cesárea, Cristina tuvo a su bebé, la menor de seis hermanos de la familia Abba, quienes viven en la comuna de Clason y a quien llamó Alma. La pequeña pesó 4,300 kilogranos y al igual que su mamá están muy bien.
Liliana luego de llegar a su casa, sacar el agua que había ingresado producto de la lluvia y poder ver a su hija fue a visitar a Cristina y a conocer a la beba.
En medio del temporal Liliana, la policía y Pablo el camionero, ayudaron a Alma en llegar a este mundo.