Desde el próximo 3 de diciembre se harán efectivos los controles por la puesta en funcionamiento de cuatro nuevos cinemómetros en la ciudad, los cuales tuvieron un tiempo de prueba tras la habilitación correspondiente por parte del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), dependiente del Ministerio de Industria de la Nación.
Los dispositivos fueron colocados y ahora están siendo debidamente señalizados con la cartelería e información necesaria conforme a lo que dispone la normativa vigente. Uno de ellos se instaló en la ruta nacional Nº 168, en el kilómetro 472 aproximadamente, frente a la Ciudad Universitaria; el otro en calle Marcial Candioti, entre Calchines y Alem, en barrio Candioti Sur. En el primero no se podrá superar los 80 km/h y en este último, se deberá circular como máximo a 50 km/h en esa zona.
Los otros dos se instalaron en las avenidas Alte. Brown al 6400 en el sentido de circulación Norte-Sur; y en Gorriti al 3400 para los que transiten de Este a Oeste desde Aristóbulo del Valle a Blas Parera. En ambos sectores no se podrá superar los 60 km/h. En todos estos puntos se podrá medir en tiempo real la velocidad de los vehículos, con el objetivo de controlar que los conductores respeten los límites establecidos.
Vale recordar que cuando un vehículo supere en esas zonas la velocidad establecida, la infracción será penalizada según la Ordenanza Nº 7.882, con multas diferenciadas de acuerdo con la cantidad en que se exceda el límite. Es importante destacar también que estos lugares fueron elegidos tras una investigación realizada por la Universidad Tecnológica Nacional Facultad Regional Santa Fe.
Reduce los accidentes
El secretario de Control del Gobierno de la Ciudad, Ramiro Dall’Aglio destacó la importancia que tienen los cinemómetros y “está demostrado por los datos en los lugares donde están colocados que el cumplimiento de la velocidad máxima permite más distancia de frenado y que así no tengamos que lamentar accidentes”, agregó al respecto.
“En particular los cinemómetros de Alem o el de la Costanera, donde están funcionando hace mucho tiempo, y redujeron mucho los accidentes con lesiones graves o fatales. Reducir la velocidad termina siendo la principal herramienta y la política de la Secretaría de Control es cuidar la vida a los vecinos. Todos tenemos que hacer el esfuerzo y respetar los límites de velocidad”, detalló Ramiro Dall’Aglio.
Al hacer referencia a estos dispositivos, el funcionario manifestó: “Uno de los más importantes y donde se generan muchos accidentes de tránsito en cadena es en la ruta 168. Es muy común que un auto, por distraerse su conductor y viniendo a una velocidad excesiva, choque con el de adelante y se sumen varios vehículos. La reducción de la velocidad tiende a ordenar y evitar estos incidentes”.
Luego dijo: “El otro importante y que fue discutido con la vecinal Candioti Sur es el de Marcial Candioti. La idea surge a partir de constatar que cuando se pasa el Callejón Caseros y para llegar más rápido a la intersección con Alem, se acelera y eso se torna peligroso por la gran cantidad de chicos y jóvenes que se encuentran disfrutando de los espacios públicos del barrio, que pueden estar en el Skate Park y los que van a las escuelas del entorno y eso va a reducir los accidentes. Allí lo permitido es un máximo de 50 km/hs”.
Durante el fin de semana se colocó la cartelería informativa y desde el próximo lunes 3 se comenzarán a labrar las actas de infracciones. “Después funciona como es habitual. En caso de cometer una falta, le va a llegar al infractor el aviso al domicilio con la foto y todos los detalles y el valor de la sanción que fija en el Tribunal de Faltas Municipal”, consideró Ramiro Dall’Aglio.
Menos infracciones
El secretario de Control anticipó que, según los datos recabados en los otros cinemómetros instalados, en el primer año de su puesta en marcha se redujo entre hasta 95% la cantidad de infracciones que se labran. "Una vez que tomamos consciencia de la necesidad de reducir la velocidad, las infracciones que cometemos se reducen sustancialmente. Esto pasó en Alem, en Aristóbulo del Valle, en Peñaloza, en la Costanera.
En el plazo de un año generalmente, se logra reducir la velocidad, conducimos más más despacio y se reducen los accidentes. Cuidamos lo más preciado que tenemos en definitiva: la vida y la integridad física de cada santafesino que es lo que moviliza todo el accionar de nuestro trabajo en Control”, detalló. "Sabemos que a todos nos cuesta un poco acostumbrarnos y es menos simpático cuando la infracción nos toca personalmente, pero también es importante que hagamos el esfuerzo de pensar que así ayudamos a evitar accidentes, graves. A salvar vidas, en muchos casos. Nada más ni nada menos".
Por otra parte, el funcionario destacó también que los dispositivos permiten realizar un conteo del flujo vehicular en la zona donde están instalados. “Esta información nos permitirá generar estadísticas precisas para definir, por ejemplo, zonas y horarios con los flujos más críticos del tránsito en distintas zonas clave de la ciudad; hacia dónde programar desvíos cuando las situaciones los hagan necesarios; o como administrar las situaciones de compresión y de eventuales embotellamientos”, enfatizó el secretario.
Antes de finalizar, Dall’Aglio recordó que “los lugares donde se colocan los dispositivos se definen tras un estudio en conjunto con la Universidad Tecnológica Nacional Facultad Regional Santa Fe, cuyos grupos de investigación nos sugieren estos puntos a partir de estudios en los que se detecta velocidad elevada o que hay muchos accidentes”.
Cómo funcionan
Los cinemómetros tienen funcionamiento automático y constan de un ordenador de última tecnología, con una placa digitalizadora de video que se encarga de congelar la señal entregada por las cámaras de CCTV (circuito cerrado de televisión) de alta definición.
El equipo guarda imágenes digitalizadas de todos los vehículos que excedieron la velocidad establecida en esa vía. Las imágenes son almacenadas en un formato apropiado para su posterior procesamiento con fines de actuación conforme a la infracción cometida. Los datos relevantes son conservados en la imagen propiamente dicha.