La Canasta Básica Total (CBT), que marca el umbral para salir de la pobreza, aumentó 7,5 por ciento en octubre, dos puntos por encima de la inflación oficial de 5,4 por ciento, y pudo ser satisfecha por una familia tipo con ingresos de 24.241,17 pesos, según informó esta tarde el Indec. La Canasta Básica Alimentaria (CBA) también tuvo una suba del 7,5 por ciento en la comparación con el mes anterior, por lo que una familia tipo necesitó 9.735,42 para no caer en la indigencia. Los valores son más alarmantes en la comparación interanual, ya que en un periodo de crisis económica y laboral, una familia necesitó en octubre cubrir gastos un 51,5 por ciento mayores para no caer debajo de la línea de indigencia y un 54,6 por ciento más para mantenerse por encima de la línea de pobreza. 

El impacto de la megadevaluación y su correlato en la inflación se hace visible al analizar las variaciones porcentuales en ambas canastas. La CBA se disparó desde mayo de este año cuando aumentó en un 4,8 por ciento en relación a abril y desde entonces, no se detuvo hasta el 7,5 por ciento registrado en octubre. Si se analiza la comparación interanual, la diferencia de mayo a mayo era del 24,9 por ciento, en agosto la comparación interanual alcanzó una diferencia del 33,6 por ciento y en septiembre del 43,1 por ciento para llegar al 51,5 del décimo mes de 2018. 

En el caso de la CBT —que contempla no solo las necesidades calóricas sino también los servicios básicos— mostró más variantes con un pico del 4,1 por ciento en junio, hasta el 3,6 por ciento en agosto, pero tras la nueva corrida cambiaria la comparación con septiembre mostró un salto del 8,1 por ciento, por encima del 7,5 registrado en octubre. En tanto, la comparación interanual del CBT muestra el mismo patrón que la CBA con subas del 10 por ciento en los últimos tres meses. 

Además de los valores necesarias para cubrir ambas canastas para una familia tipo, el informe del Indec también señala la situación de una familia conformada por una jefa hogar, su hijo y su madre, que debieron generar ingresos por  7.750,53 pesos para no caer en la indigencia, cuando un año atrás precisaban hacerse de 5.114,91; mientras que tuvieron que desembolsar 19.298,80 pesos mensuales para no ser pobres, cuando en octubre de 2017 precisaban 12.480,37. 

Por otra parte, una pareja con tres hijos tuvo que generar ingresos por 10.239,52 en octubre para caer en la indigencia o 25.496,38 para superar el umbra de la pobreza. 

Durante la campaña 2015 y en reiterados discursos presidenciales, Mauricio Macri pidió que su gestión sea evaluada por los niveles de pobreza con los que terminaría su mandato. Las cifras oficiales parecen anticipar los pronósticos de la Universidad Católica Argentina —fuente de autoridad para Cambiemos— que ya advirtió que de acuerdo con sus relevamientos habrá un crecimiento explosivo de pobreza e indigencia.