Uno de los primeros en llegar a la Argentina por la Cumbre del G-20 fue el príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salman, quien está denunciado por violaciones a los derechos humanos.
Antes de su arribo, la organización internacional Human Rights Watch (HRW) presentó ante la justicia argentina una denuncia contra Bin Salma y pidió se lo investigue por presuntas violaciones del derecho internacional cometidas durante el conflicto armado en Yemen.
Según Human Rights Watch, Bin Salman "sería penalmente responsable" de esas violaciones como ministro de Defensa de Arabia Saudita, señala un despacho de la agencia EFE.
"Las autoridades judiciales deberían evaluar el papel de Mohammed bin Salman en posibles crímenes de guerra cometidos por la coalición liderada por Arabia Saudita en Yemen desde 2015", afirmó Kenneth Roth, director ejecutivo de Human Rights Watch, según publica la página del organización humanitaria.
El escrito presentado ante el fiscal Ramiro González recayó el el juzgado federal a cargo de Ariel Lijo.
Ese escrito también hace alusión a la posible complicidad de Bin Salman en graves denuncias de tortura y otros malos tratos de ciudadanos saudíes, incluyendo el asesinato del periodista Jamal Khashoggi, perpetrado a inicios de octubre en la embajada saudí en Turquia.
"La participación del príncipe heredero en la cumbre G20 en Buenos Aires podría permitir que las víctimas de abusos que no lograron que se haga justicia en Yemen o Arabia Saudita puedan obtenerla en los tribunales argentinos", agregó Roth.
Además, HRW recordó que la Constitución argentina reconoce la jurisdicción universal por crímenes de guerra y torturas, lo que implica que las autoridades judiciales del país están facultadas a investigar y juzgar estos delitos, con independencia de dónde se cometan y de la nacionalidad de sus autores o las víctimas.
"La decisión de autoridades argentinas de avanzar con una investigación enviaría una señal fuerte de que incluso los poderosos como Mohammed Bin Salman no están más allá de la ley. Y Mohammed bin Salman debería saber que, si va a la Argentina, podría enfrentarse a una investigación penal", presionó Roth.