Una familia tipo necesitó en noviembre un ingreso de por lo menos $ 25.206,03 para no ser pobre y cubrir el costo de la Canasta Básica Total, que subió 57,3% en doce meses, informó este martes el Indec.
La Canasta Básica Alimentaria (CBA) en noviembre tuvo un incremento de 4% al igual que la variación de la Canasta Básica Total (CBT).
El avance de la canasta superó a la inflación, que en ese mismo mes fue de 3,2%, un dato que marcó una desaceleración pero fue superior a la estimada por consultoras.
De este modo, el proceso inflacionario volvió a afectar a los sectores de menores recursos porque los aumentos más fuertes se registraron en alimentos y artículos de primera necesidad.
En comparación con noviembre del año pasado, el Indice de Precios al Consumidor (IPC) trepó al 48,5%.
En tanto, la variación interanual de la CBA, que determina los ingresos necesarios por hogar para superar el umbral de indigencia, registró un avance de 54,1%.
La CBT, que también toma en cuenta bienes y servicios no alimentarios, arrojó un aumento de 57,3%.
Así, en ambas canastas, el ritmo de crecimiento fue mayor al de la inflación.
El sondeo señaló de ese modo que una familia de cuatro integrantes debió contar con una entrada mensual de $ 25.206,03 para no caer en la pobreza.
Ese mismo hogar precisó contar con $10.122,9 para no ser considerado indigente, de acuerdo con el análisis difundido por el instituto que conduce Jorge Todesca.
Se trató de un ajuste de $ 964,86 de la CBT en el período comprendido entre noviembre y octubre.
La suba fue de $ 387,4 para la CBA, precisó el informe oficial publicado este martes.
En el caso de una familia de cinco personas, el monto necesario para cubrir los costos de la CBT fue de $ 26.511,19, mientras que para afrontar los de la CBA la cifra fue de $ 10.647,07.
A su vez, el estudio puntualizó que un hogar de tres miembros tuvo que tener por lo menos $20.066,93 para no ser pobre, al tiempo que debió contar con $ 8.059,01 para no estar por debajo de la línea de indigencia.