El ex jugador de Unión, Colón, Ríver y Boca entre otros equipos, fue encontrado muerto en el predio de la Liga Santafesina. Trabaja en el lugar la PDI.
Sus allegados dicen que el ex mediocampista atravesaba un cuadro depresivo. De hecho, la semana pasada había sido hospitalizado de urgencia por un intento de suicidio con pastillas. Le realizaron un lavaje de estómago y en 48 horas le dieron el alta.
Además, vivía una situación personal compleja. Su último trabajo como director técnico fue en el club Rampla Juniors de Uruguay, en febrero de este año.
El doctor Andres Marchi llegó al lugar pasadas las 9 de la mañana e interviene la fiscalía de homicidios.
El jugador vivía tiempos difíciles. Hace seis años había superado un cáncer de ganglios linfáticos (linfoma no-Hodkings): "En ese momento se te vienen muchas cosas a la cabeza. Al principio me agarró un bajón y estaba mal anímicamente. Me encerraba en la habitación e iba a llorar al baño", confesó en 2013. Y aseguró que su fe en Dios y su familia lo ayudaron mantenerse entero para dar pelea. "Me aferré a mi familia y a Dios. Soy muy creyente y recé mucho. Dios es grande y existe", concluyó el jugador cuando tuvo los resultados de la última biopsia.
Toresani tenía 51 años y luego de su retiro profesional se había dedicado a la carrera de entrenador. En su último paso por el club charrúa había terminado su ciclo de la peor manera con el presidente de la institución, Ignacio Durán, con quien llegó a discutir y según los medios del país vecino hubo un intento de ambas partes de tomarse a golpes de puño en su último encuentro.
En su faceta como director técnico debutó en el plantel de San Martín de San Juan en el 2005, pero luego se caracterizó por liderar equipos del ascenso del interior. Sportivo Italiano, Deportivo Madryn, San Martín de Mendoza, Textil Mandiyú, Alumni de Villa María y Sportivo Patria fueron algunos clubes en los que dirigió además del Sabalero y Aldosivi.