Cuatrillizos en Paraná: Nacieron dos pares de gemelos, algo inédito en el mundo
Magalí, Victoria, Gabriel y Benjamín nacieron en Paraná con 32 semanas de gestación y 1,300 kilos promedio. Llegaron luego de varios intentos y expectativas frustradas de sus padres que llevaban más de dos años en la búsqueda del embarazo.
JUEVES 16 DE MAYO DE 2019
El viernes 10 de mayo nacieron en dos pares de gemelos en Paraná, un caso prácticamente inédito en el mundo. "Hablamos de un hecho médico muy poco frecuente", aseveró el médico León Goldbarg.
Conceptualmente, los gemelos son producto de la división de un embrión en dos embriones de igual material genético; según la Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva (SAMER), la incidencia de gemelación de un embrión es del 0,4 a 0,3%, mientras que la tasa de gemelación de dos embriones a la vez -como es este caso- es tan baja, que ni siquiera está publicada a nivel mundial.
Se sabe que la pareja, oriunda de Concepción del Uruguay, tenía más de dos años en la búsqueda de ser padres; luego de varios intentos y expectativas frustradas, llegaron a un Centro de Reproducción Asistida de Paraná con la ilusión de encarar un tratamiento que les permitiera concretar el postergado anhelo.
Así, en octubre de 2018 se realizó la transferencia de "dos embriones de 8 células, día 3, 72 horas postfecundación", detalló la doctora Mercedes Cabrera y luego, sucedió lo inesperado: "Nuestra paciente desarrolló algo poco común en la biología del desarrollo embrionario y fetal: gestar en forma simultánea dos niñas con igual código genético, cada cual con sus bolsas amnióticas, que surgieron de un solo ovocito y un solo espermatozoide; y a la vez dos varoncitos, cada cual con sus bolsas amnióticas, e idéntico código genético, que surgieron de un solo ovocito y un solo espermatozoide".
Después de 32 semanas, nacieron los cuatro bebés: Magalí, Victoria, Gabriel y Benjamín. Se supo que pesaron poco más de un kilo en promedio, por eso permanecen en el área de Neonatología del Instituto Rawson, de la capital entrerriana. "Es un muy buen peso, para un bebé prematuro", expresó satisfecho Goldbarg y también destacó a Diario Uno el "gran trabajo" de la mamá que pudo garantizar el desarrollo y el crecimiento de los bebés en reposo absoluto: "Tenía cerca de 5 kilogramos de bebé en la panza, más la placenta", explica y se muestra optimista en cuanto a la evolución de los y las bebés.
Goldbarg y Cabrera valoraron al embarazo como un "evento biológico poco frecuente" y resaltaron la atención del personal del sanatorio de calle Carbó, y de la obra social de la Provincia de Entre Ríos (Iosper) que cubrió el tratamiento de manera integral.