Esta mañana a las 10 dará inicio en la sala 1 del subsuelo de Tribunales la audiencia de Juicio Abreviado en el caso que lo tiene como imputado a Facundo Solis por el quíntuple femicidio de diciembre de 2017 en Zazpe al 4100.
La audiencia será presidida por los jueces Rodolfo Mingarini (presidente), José Luis García Troiano y Nicolás Falkenberg. Por el lado del Ministerio Público de la Acusación está el Fiscal Gonzalo Iglesias y Mario Guedes será el Defensor Oficial. Además, en representación de las víctimas y como querellantes estarán Laura Gerard y Vivían Galeano del Centro de Asistencia Judicial (CAJ), y como abogada particular en la querella la Dra. Hilda Khaeblein.
Según se anticipó, las partes acordaron que Solis sea condenado a prisión perpetua por los cinco crímenes. Luego el Tribunal deberá homologar el acuerdo llevado a cabo entre la Fiscalía, querella y defensa.
En la actualidad, Solís permanece detenido en el modulo C de la cárcel de Piñero. El femicida, que oficiaba en la Unidad de Traslados Judiciales y que además era boxeador, se encuentra imputado por el delito de «homicidio calificado por el empleo de arma de fuego, por el vínculo y por ser perpetrado por un hombre en contra de una mujer mediando violencia de género (femicidio)» y por cuatro «femicidios vinculados«. A más de un año de la masacre, cerrará un abreviado de prisión perpetua.
El hecho
El caluroso viernes 29 de diciembre Solis causó una de las masacres más sangrientas que la historia penal de Santa Fe recordará. Cerca de las 14, en una modesta vivienda de Zazpe al 4100, el agente penitenciario ingresó por una puerta trasera a la vivienda de su expareja, Mariela Noguera. Allí, sacó su arma reglamentaria y mató a Yoel Airaldi quien era el novio de la hija de su ex. Luego hizo lo mismo con Aylen Tamara Soto, la hija de Mariela.
Aquella conducta de Solís tuvo un claro mensaje: causar sufrimiento a su expareja. Es por esa razón que el imputado llamó en ese momento a Mariela y le avisó que había matado a su hija y que continuaría haciéndolo con el resto de sus familiares. Cuando Mariela llegó a la propiedad, el asesino la abordó en la vereda y le disparó en la cabeza, según estableció la pesquisa judicial.
Cometido aquel femicidio, el exagente fue hasta la vivienda contigua donde vivía Generosa Carmen «Cuqui» Loseco, su exsuegra y quien también resultó víctima fatal de la fiebre homicida desatada por Solís.
Finalmente, salió de la casa de «Cuqui» y fue hasta lo de su excuñada. Allí mató a balazos Sonia Isabel Noguera y además le disparó al hijo de esta quien por fortuna logró sobrevivir.
Fuente: Prensa Tribunales y Diario UNO