El ex arquero de Colón, Germán Montoya, recordó por Deporte 9 el partido y el triunfo agónico frente a Olimpo: el 18 de mayo de 2014, Colón ganaba 2 a 1 a los de Bahía Blanca, con los goles de Gandín y Alario y forzaba así un desempate frente a Atlético Rafaela que desencadenó luego en el descenso, pero igualmente recordado por la gran campaña de Diego Osella y por la entrega de ese equipo con mayoría de jugadores del club.
Ese día Colón formó con: Montoya; Castillo, Conti, Landa, Bittolo; Graciani, Meli, Videla, Fernandez; Luque y Alario.
La síntesis y la historia de este encuentro, con las miradas puesta en Atlético Rafaela:
En Sarandí, jugaban Arsenal y Atlético de Rafaela, que compartía la misma cantidad de unidades que el Sabalero en la lucha por la permanencia.
La tarde parecía encaminarse de la mejor manera para los de barrio Centenario, porque Arsenal lograba la apertura del marcador en Sarandí, y en el Cementerio estaba todo controlado, pero de un momento a otro todo cambió.
A los 3 minutos del complemento Rafaela logra la igualdad, con un golazo de tiro libre de Juan Eluchans. Mientras que en Santa Fe, Olimpo sorprendió a todos con un gol de Sarulyte a los 18 minutos, algo que condenaba totalmente a Colón. Y a partir de aquí todo se volvió una película y el sufrimiento de un estadio Brigadier López colmado, en un encuentro no apto para cardíacos.
A los 25 minutos y de penal, el 'Chipi' Gandín lograba la igualdad para el Sabalero, algo que empataba transitoriamente la historia con los de Rafaela en la lucha por la permanencia.
Se jugaba tiempo de descuento en ambos partidos y la vida decidió poner a prueba a los corazones de los miles de hinchas rojinegros. A los 47 minutos del segundo tiempo, Lucas Albertengo le daba la victoria a Rafaela ante Arsenal, faltando segundos para el final del encuentro, y con ese resultado decretaba el descenso de Colón.
Pero la prueba final fue cuando a los 48 minutos y tras una serie de rebotes, Lucas Alario convirtió el gol de la victoria, que desató la locura y el llanto de absolutamente todos los hinchas, cuerpo técnico y jugadores. Colón lograba forzar a un partido desempate, luego de 90 minutos de mucha angustia y sufrimiento.
En dialogo con Deporte 9, Germán Montoya expresó: "La verdad que el recuerdo de ese partido, es algo que vive a flor de piel. Ya desde que llegamos al estadio, con el optimismo de la gente, acompañándonos con mucha lealtad en todo ese semestre".
"Fue entrar a la cancha al borde de las lágrimas. Salir de la manga y el recibimiento increíble, se me escaparon algunas lágrimas. Recuerdo las arengas de Diego Osella, el cuerpo técnico entero estaba en cada mínimo detalle", agregó Montoya.
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