El Gobierno de Santa Fe autorizó a partir de este miércoles la apertura de natatorios en todo el territorio provincial, a excepción de las localidades que tienen restringidas las actividades deportivas, con un estricto protocolo de seguridad para evitar contactos entre las personas y minimizar los riesgos de contagios de coronavirus.
Según publicó la agencia nacional de noticias Télam, la principal restricción está dada en el tema de las duchas, que no fueron habilitadas, por lo que las personas solo pueden utilizar los vestuarios para cambiarse de ropa y respetando el distanciamiento social.
Además de la parte deportiva, la actividad de las piletas tiene importancia para aquellos pacientes de distintas patologías que utilizan el agua para fines terapéuticos y para rehabilitación.
La secretaria de Deportes de Santa Fe, Claudia Giaccone, afirmó que con la habilitación de los natatorios "ya tenemos todas las disciplinas (deportivas) individuales permitidas en esta fase de distanciamiento".
La funcionaria explicó que "esto se regirá por un protocolo muy estricto, que ya está consensuado con el sector" y en ese sentido, remarcó que "tiene que nadar una sola persona por andarivel, no se pueden alterar los turnos de los grupos y no se podrán utilizar las duchas, pero sí los vestuarios respetando la distancia".
La funcionaria sostuvo que en el Gobierno entienden "que para los clubes será muy difícil abrir las piletas bajo estos protocolos, por el tema de los costos" y que "será más factible para natatorios privados y para piletas que se utilizan para rehabiltiaicón".
"Sabemos que la actividad física es terapéutica. Tenemos que cuidar la situación actual de Santa Fe, porque somos una perlita en el país, en relación a lo que padecen otras localidades con la pandemia", concluyó.
Los directivos de clubes que tienen piletas climatizadas en la capital provincial calificaron como inviable el funcionamiento con las restricciones que imponen los protocolos. En diálogo con LT9, el gerente del Gimnasia y Esgrima de calle 4 de Enero y Juan de Garay expresó: "Lo de la apertura es relativo, porque la formalización de los protocolos para los natatorios va más allá de la simple apertura. Hay muchas situaciones que aún no están claras. Esto está más dirigido a natatorios privados y de explotación comercial que a los clubes".
"Nosotros tenemos un costo base de mantenimiento de una pileta climatizada y abrirlo hoy, tiene un costo cercano a los 500 mil pesos mensuales. Entonces abrir con un protocolo que establece una persona por andarivel de por medio, en un ambiente climatizado no es posible”, aseguró Sabattini.
“Para que puedan ir a nadar 50 personas no es rentable, hoy se necesitan 500 u 800 personas. Es una actividad muy compleja por lo menos para los clubes", enfatizó.