Luego de que el gobierno provincial dispusiera un endurecimiento de las restricciones en la ciudad de Las Rosas, su intendente Javier Meyer explicó por LT9 que el cierre de ciertas actividades comerciales se venía dando, con varios bares y comedores cerrados, por decisión de sus dueños y el decreto del gobernador viene a reforzar el comportamiento de la ciudadanía. Pero entiende que no es necesario ser tan restrictivos, porque la gente está agotada. Hay que cuidarse y continuar con la actividad comercial y laboral sostuvo Meyer.
“Además analizó q ue la mayoría de los últimos contagios se dio por ovimiento interdistrital, sobre todo de gente joven que trabaja en otras ciudades. Pero algunos discriminan a ciertos lugares porque tienen positivos, la sorpresa que se van a llevar es no poder reconocer el paradero del Covid”, haciendo referencia a perder los nexos epidemiológicos, con lo que se entra en el status de circulación comunitaria.
Meyer sostuvo que “la primera parte de esta cuarentena en todos lados fue lo que hoy genera que la gente esté rebelde, que quieran trabajar, porque afectó la actividad comercial de muchas personas”. El intendente de Las Rosas interpreta que el gran error fue haber hecho una cuarentena tan estricta al no haber circulación. Ahora la gente está cansada, aunque dejó claro que no le hecha la culpa al gobierno porque entiende que es algo nuevo que sorprendió a todos.
Dijo que ante esta realidad lo único que nos queda es cuidarnos. La velocidad con la que se vaya esparciendo este virus tiene que ver con la conciencia que tomemos como ciudadanos. Hoy no estamos en condiciones de parar o ir a Fase 1. No estamos en condiciones económicas. Se ha deteriorado el ánimo sobre todo de la gente mayor. Está claro que a los que más hay que cuidar es a los adultos mayores.
Y finalizó diciendo que “nadie está exento debemos cuidarnos todos porque tenemos que funcionar, una enfermedad no nos puede doblegar cómo país, pero tomando muchas precauciones”.