"Nada cambió, creo que incluso estamos peor porque tenemos la misma cantidad de asesinatos incluso con la pandemia", dijo esta mañana la madre de Julio Cabal, muerto hace exactamente un año atrás cuando intentó repeler el asalto a su fiambrería de calle Urquiza casi Salta, en el macro centro de la ciudad de Santa Fe.
Aquel hecho conmocionó a la capital santafesina y provocó una de las movilizaciones más numerosas que se recuerde en los últimos tiempos, determinando además la intervención en la Unidad Regional Uno de policía.
María Inés Massino, su mamá, quien se realizó un tatuaje en uno de sus hombros para recordar a Julio, dijo esta mañana por LT9 que tenía ganas de hacer un recital de música y poesías como le gustaba a su hijo, pero que la situación sanitaria lo impide. Además expresó que hoy fue a su trabajo al Hospital Cullen porque "la pandemia no da tregua".
Tan crítica como siempre con el accionar de las autoridades, María Inés expresó que "a la dirigencia no le importa el pueblo, tienen un sueldo gordo y lo demás no importa", contó la dolida mujer ante la prensa.
Los hechos
Julio Cabal fue asesinado el mediodía del 17 de setiembre de 2019, cuando ya se preparaba para cerrar el local, donde también estaba una empleada. Un asaltante irrumpió en ese momento y lo ejecutó sin remordimientos con un balazo en el pecho.
Por el crimen fue detenido unos días después Juan Cruz Gambini, un sujeto con abultados antecedentes delictivos que fue imputado por el hecho y actualmente permanece en prisión preventiva mientras avanza la investigación.