El secretario general de Sadop Rosario, Martín Lucero, dijo en Primera Mañana que necesitan más precisiones sobre la nueva modalidad de clases que se aplicará este año con alternancias entre presencialidad y trabajo desde casa, tal como lo expresó por LT9 la ministra de Educación Adriana Cantero, en el marco de la pandemia de coronavirus.
"Necesitamos tener precisiones sobre estos temas. El año ha dejado se ha anunciado varias veces la vuelta a la presencialidad y de alguna manera no se ha podido ratificar. Cuando uno habla de un formato bimodal, alternando lo virtual y lo presencial, requiere una serie de especificaciones hacia adentro de los establecimientos, y respecto a la organización laboral y familiar", expresó el dirigente gremial.
Dentro de las preguntas por ahora sin respuestas sobre el nuevo modelo se encuentran: "¿Qué pasa con los chicos que están en la virtualidad esa semana? ¿Quién les va a dar clases? ¿Cómo se les van a dar las clases? ¿Durante cuánto tiempo? ¿Cuáles van a ser los horarios de ingreso y egreso? Hay un montón de preguntas del cómo va a ser que no tenemos".
"No solamente de la parte nuestra, para la organización familiar también. La sociedad debe volver a acomodarse a modalidades nuevas del sistema educativo. En la cultura argentina y latinoamericana la vida social, la 'normalidad', está armada en función de que la escuela esté abierta. Ahora vamos a tener este tipo de situaciones. No sabemos cómo vamos a abordar eso porque cada vez que tiene que avanzar en cuestiones de gestión el Ministerio hace agua", apuntó Lucero.
Y agregó que "hay que lograr grandes consensos sociales. El Ministerio tiene que explicarles a las familias cómo va a ser esto y de qué manera. Cuando empezamos a hacer las preguntas, hay un montón de respuestas que no están. Ahí postergamos y ya la culpa es de los maestros o de los sindicalistas".
Más adelante el representante docente reconoció que "fue positiva" la experiencia de la vuelta a la presencialidad hacia el final del año. "Los protocolos funcionaron, fueron vinculaciones muy cortas, grupos de 8. Ese sistema funcionó, fue ágil. Mientras los grupos sean manejables y la circulación dentro del establecimiento se puede razonablemente gestionar", aseguró Lucero.
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