En un comunicado, los obispos de la Provincia de Santa Fe expresaron su “desconcierto y convencida disconformidad” ante las nuevas medidas restrictivas dispuestas por el Gobierno Provincial, por las cuales se prohíbe toda actividad religiosa en lugares cerrados.
“Comprendemos la necesidad de adoptar medidas sanitarias para luchar contra la pandemia, cuidando así la salud de nuestro pueblo. Sin embargo, las mismas deben ser aplicadas con el máximo respeto a los derechos y garantías consagrados por nuestra Constitución Nacional” sostiene el mensaje, que lleva la firma de Sergio Fenoy (Arzobispo de Santa Fe), Eduardo Martín (Arzobispo de Rosario), Angel Macín (Obispo de Reconquista), Luis Fernández (Obispo de Rafaela), Gustavo Help (Obispo de Venado Tuerto), y Han Lim Moon (Obispo Coadjutor de Venado Tuerto).
Agregan que “la religiosidad es el alma de los pueblos latinoamericanos, por eso la dimensión religiosa de la persona humana es un aspecto esencial del bienestar integral de la población y el fortalecimiento espiritual de las personas; por lo cual las medidas y disposiciones que tomen las autoridades deberían atender siempre a su resguardo”.
En otro tramo del comunicado, los obispos consideran que “en todo este tiempo, nuestras comunidades cristianas han aprendido a cuidarse cumpliendo con todos los protocolos sanitarios, siendo muy respetuosas de los mismos”.
En este sentido, aseguran que “estas nuevas restricciones parecen desconocer este valioso esfuerzo de nuestro pueblo, imponiendo condiciones que dificultan aún más la participación de los fieles en todas las actividades religiosas. Sumar restricciones, no es la solución que nuestro pueblo espera y necesita para crecer en la responsabilidad personal y social”.
Por último, reiteraron el agradecimiento “a la gran vocación de servicio de todos los agentes de salud, trabajadores de la educación y agentes de seguridad, que realizan un formidable esfuerzo en la lucha contra esta pandemia. Asimismo, renovamos nuestro compromiso con el cuidado y salvaguarda de la salud de todas y cada una de las personas, en especial de aquellas más débiles y vulnerables”.