Este miércoles, y tras una logística de traslado compleja, llegó el tanque de agua para la planta potabilizadora que se construyó en Colastiné Sur para proveer de este servicio al barrio más antiguo de la ciudad de Santa Fe.
Se trata de un tanque de 80 metro cúbicos, que estaba en el norte de la ciudad, y que no se estaba usando. “Se pudo trasladar gracias a una logística compleja. Fue traslado en un carretón. Se tuvo que buscar calles anchas y el problema más complejo fue la altura del puente que está en al ruta 168, a la altura de barrio El Pozo. Eso exigió que tengamos que colocar un carretón extra chato. El tanque pasó muy finito, pero el tanque ya hoy está en el lugar donde lo vamos a montar en los próximos días” detalló la secretaria de Infraestructura y Asuntos Hídricos de la Municipalidad, Silvina Serra.
La funcionaria agregó que “la obra de provisión de agua potable para Colastiné Sur es una obra muy importante, ya que es el barrio costero más antiguo de la ciudad. Tiene 358 años, no tiene agua potable y está al lado del río Colastiné, que tiene una excelente calidad. Es una obra histórica y la estamos cumpliendo. En poco tiempo la vamos a estar inaugurando”.
Expectantes y ansiosos
Marcela Fernández es la presidente de la vecinal Colastiné Sur y junto a otros vecinos llegó hasta donde se monta la planta potabilizadora. “Estamos muy felices, esperando el último tramo, ya falta muy poco. Todos los días miramos cómo va avanzando, paso a paso la vamos siguiendo. Después de 359 años vamos a tener agua, esto era una decisión política y que haya sido Emilio (Jatón) quien la tomó nos pone muy felices”, destacó.
Antes de finalizar, expresó: “Todos somos un poco espectadores de la obra y vemos el avance. En pocos días vamos a tener agua y no lo podemos creer. Además va a ser el agua de mejor calidad porque es el río menos contaminado de Santa Fe y lo vamos a tener nosotros por eso no tenemos más que palabras de agradecimiento hacia el municipio”.
Vale recordar que Colastiné Sur es uno de los barrios más antiguos de la capital provincial y no cuenta con el servicio de agua potable, por lo que se trata de una necesidad primaria de sus habitantes. Para ello, se proyectó la provisión del vital elemento a través de obras de captación, potabilización, almacenamiento y distribución. Serán 337 los domicilios que se conectarán a la red, es decir que unos 1.500 vecinos y vecinas, en pocos días, podrán abrir una canilla y tendrán el servicio.
Hoy el abastecimiento de agua es a través de camiones que a diario llegan al barrio y llenan recipientes ubicados frente a los domicilios, luego con un sistema de bombeo sube a los tanques y después se distribuye en los hogares. El presupuesto total supera los 56 millones de pesos que son aportados de manera integral por el municipio.