El Ministerio de Salud provincial informó que durante los días jueves, viernes y sábado se realizaron 411 cirugías oftalmológicas a pacientes ciegos por cataratas en el hospital Eva Perón de Granadero Baigorria.

Al respecto, la ministra de Salud provincial, Sonia Martorano, expresó que “gracias a la generosidad de la fundación Elena Barraquer, de los doctores Fernando García y Carlos Ferroni, los directores del efector y todo el equipo de salud de este hospital, se pudo realizar esta maratón de cirugías oftalmológicas en sólo 72 horas”.

“Además, esto fue posible gracias a la articulación entre los sectores público y privado, diferentes especialistas de todo el país nos permite ponernos bastante al día con las cirugías que venían atrasadas, debido a la agenda que ocupó la pandemia”, concluyó Martorano.

Por otro lado, el jefe del servicio de Oftalmología del hospital Eva Perón, Fernando García, explicó que “este proyecto comenzó en febrero de este año, luego de una reunión con los directivos del hospital escuela Eva Perón. Junto con el doctor Ferroni, coordinamos esta campaña donde se reclutaron pacientes durante 6 meses y lo pudimos llevar a cabo los días 8, 9 y 10 de este mes”.

“Se armaron 5 quirófanos en simultáneo a disposición de esta actividad, quedando otros 2 para cesáreas y urgencias en el efector. Se citó previamente a cada paciente para darle las indicaciones, se dieron 3 turnos con diferencia de 4 horas y se realizaron las cirugías en simultáneo”, continuó.

Asimismo el profesional mencionó que “se llevó adelante una cirugía moderna de cataratas, sin suturas, con lentes plegables para la recuperación rápida y estimamos que el 99% de los pacientes va a estar de alta en menos de un mes. Algún paciente que tuvo esta patología un poco más avanzada, puede llegar a tener algunos días mas de pos operatorio. Estamos muy satisfechos por los resultados quirúrgicos”.

“No quiero dejar de agradecer a todo el personal del hospital que trabajó con total dedicación, apoyo y generosidad en esta campaña. Desde el primero al último se dedicó a resolver los inconvenientes que aparecían, trabajando desde las 5.30 de la mañana hasta las 9.30 de la noche para la comunidad”, concluyó Fernando García.