Los ecuatorianos erraron el paso al regreso de Rafael Correa a la Presidencia al votar mayoritariamente contra la reelección indefinida de los cargos políticos en un referéndum que ha contado con una elevadísima participación ciudadana del 82%.
Además, la consulta de este domingo supone un fuerte respaldo al actual presidente del país, Lenín Moreno, que defendía el cambio de esa posibilidad introducida en las leyes de Ecuador cuando Correa era el jefe del Estado.
Nueve meses después de asumir el cargo, este referéndum se consideraba un barómetro del respaldo a la gestión de Moreno, que se ha visto marcada desde el inicio por el enfrentamiento con Correa, su antiguo correligionario, convertido ahora en un rival político.
En las siete preguntas planteadas a la ciudadanía en la consulta ha ganado la opción del Sí, la que defiende derogar enmiendas a la Constitución y leyes aprobadas durante los años de presidencia de Correa, entre 2007 y 2017, como las que permiten la reelección indefinida de autoridades o la ley de plusvalía, diseñada para impulsar la construcción y las inversiones.
También se ha ganado el sí a la reestructuración del Consejo de Participación Ciudadana, órgano que designa a las autoridades de control en el país.
Al conocerse los primeros resultados que apuntaban la victoria del Sí, el presidente agradeció al pueblo y a las instituciones su participación en la jornada electoral y destacó que "no volverán ya los viejos políticos", sin mencionar a ninguno en concreto, pero en referencia indirecta a Correa.
Desde el Palacio presidencial de Carondelet, en Quito, Moreno se mostró vehemente e impaciente por poner en marcha los mecanismos para transformar los resultados de la consulta en una realidad legal.
"Todos estamos obligados a concretar este mandato sin ninguna demora", zanjó Moreno antes de avanzar que en los próximos 30 días la Asamblea Nacional iniciará el trámite para poner en marcha la aplicación de las legislaciones respaldadas por el electorado.