Una mujer de 26 años identificada como Natacha Ivón Aguirrez fue condenada a tres años de prisión efectiva por haber robado dos motos en Santo Tomé.

El fiscal de la Oficina de Flagrancia e Investigación de la Unidad Fiscal Santa Fe, Eric Fernández, está a cargo de la investigación. “Aguirrez llevó a cabo sus conductas delictivas con un hombre de iniciales JGL que está imputado como coautor y transita el proceso judicial en prisión preventiva”, indicó el representante al MPA.

Los hechos

Fernández señaló que “en noviembre del año pasado, mientras la condenada y el imputado transitaban en moto por Hipólito Irigoyen y Aristóbulo del Valle interceptaron a otro motociclista, lo amenazaron y le robaron el vehículo”. Según precisó, “lo intimidaron con un arma de fuego”.

Fernández sostuvo que “con la misma modalidad, los atacantes abordaron con violencia a una mujer que circulaba por el pasaje Nicasio Oroño al 2500”. Expuso que “el hombre investigado amenazó de muerte a la víctima si no le entregaba sus pertenencias”, y detalló que “así se apoderaron ilegítimamente de la moto, un teléfono celular y una billetera que contenía documentación, tarjetas y dinero en efectivo”.

Asimismo, el fiscal afirmó que “en otra ocasión, Aguirrez y quien está en preventiva intentaron apropiarse de un motovehículo en la esquina de Juan José Paso y Dorrego”, y aclaró que “no lo lograron por razones ajenas a su voluntad”.

Por último, puntualizó que “la condenada y el imputado hurtaron un teléfono celular en la intersección de Macia y Alberdi, donde le pidieron a la víctima que les prestara el dispositivo para realizar una llamada”. Al respecto, mencionó que “una vez que lo tuvieron en su poder, escaparon en moto”.

Abreviado

Aguirrez reconoció su responsabilidad penal como coautora de robo agravado (por la utilización de un arma de fuego, cuya aptitud para el disparo no pudo ser acreditada); robo simple -en un caso consumado y en otro, en grado de tentativa-, y hurto.

La sentencia fue resuelta por la jueza Cecilia Labanca en el marco de un juicio en el que se abreviaron los procedimientos desarrollado en los tribunales de la ciudad de Santa Fe.

Por su parte, la Defensa aceptó la atribución delictiva, la pena impuesta y la modalidad del juicio.