Antonella Pochettino, una joven chaqueña residente en Buenos Aires, murió el domingo a la mañana luego de caer de un tercer piso en una torre de Puerto Madero.

La joven de 25 años tenía una hermana melliza, Macarena, y eran las dos mayores de cinco hermanos de una familia reconocida en la ciudad de Presidencia Roque Sáenz Peña, en Chaco. Su padre, Marcos, es uno de los cardiólogos de mayor reputación en toda la ciudad.

Antonella terminó la secundaria en 2010, un año después de haber sido nombrada Reina de los Estudiantes de la ciudad, en representación de su escuela Don Orione. Este hecho generó confusión acerca de una carrera como modelo que nunca existió: "Antonella nunca fue modelo. Habrá participado de muy chica en uno o dos desfiles de nuestra ciudad, pero ella se dedicó desde un principio a sus estudios. No era modelo", dijo Claudio, un amigo de la familia que prefirió reservar su verdadera identidad. Versión que luego otra amiga repitió en televisión.

Una vez finalizada la secundaria, la joven se mudó a Córdoba para desarrollar sus estudios terciarios en la Universidad Nacional de Córdoba. Y se mudó a Capital Federal.

"Con su hermana melliza eran muy, muy pegadas. Maca era más tímida y callada, pero Anto era más pícara y habladora. No había manera de que no te rieras con ella", aseguró una amiga de su infancia que también prefirió mantener la reserva.

"Ella sabía ver lo divertido y lo lindo de las cosas simples. Siempre hacía lo que tenía ganas de hacer y eso la convirtió en una chica feliz", agregó la amiga.

El dueño del departamento es un joven de 33 años quien declaró que la caída fue producto de un accidente. Declaró que la joven economista se sentó en el borde de la baranda y se cayó al vacío sin que la pudieran rescatar.

Así y todo el propio magistrado Nardiello informó que las declaraciones de las seis personas del departamento no fueron coincidentes respecto a lo que sucedió entre las 7 y las 8 de la mañana del domingo. Por lo pronto, la causa quedó caratulada como "averiguación de causales de muerte".

Fuente: La Capital