El Gobierno cerró la jornada confiado en que logró poner a "temperatura de otoño" el paro que podría decretar la CGT en su reunión de consejo directivo de hoy. De hecho, dirigentes de esa central obrera se encontrarán con Mario Quintana y Nicolás Dujovne, vice jefe de Gabinete y responsable de Hacienda respectivamente. Para el Ejecutivo el eje central es acercar una propuesta para evitar la huelga nacional al encuentro a concretarse en la Casa Rosada será a las 11. Los cegetistas llegarán con un borrador de pretensiones que esperan sean satisfechas.

La comitiva sindical la integrá el triunvirato (Juan Schmid, Héctor Daer y Carlos Acuña), José Luis Lingeri, Andrés Rodríguez y Jorge Sola entre otros.

Durante la reunión de mesa ampliada que tuvo lugar hasta anoche en UPCN, en versión ampliada, algunos dirigentes de Azopardo departían cuando llegó una llamada de la Casa Rosada para hacer la invitación. Si bien el envite no fue bien recibido por algunos dirigentes se acordó finalmente concurrir acordando cuatro puntos básicos en el planteo: aguinaldo sin quita de ganancias, pacto para que no haya despidos hasta fin de año, reapertura de paritarias y negativa a la reforma laboral. La eventual contraoferta podría alcanzar incluso la cláusula gatillo para "todos y todas" los trabajadores, que fuentes de los sindicatos más decididos a concretar el paro consideraban poco menos que una broma. El consejo directivo cegetista analizará la reunión con el Gobierno a las 14 y habrá cuarto intermedio hasta el martes. La víspera del posible anuncio de un paro general agitó la agenda del Gobierno en busca de frenos, marcó la cancha sin dudas la energía con la cual Hugo Moyano encabezó una asamblea de Camioneros, al anticipar un paro nacional de su organización para el jueves 14 si fracasa la paritaria del sector. Todo bajo el dictado de conciliación obligatoria que decretó la cartera laboral para la puja de ese sindicato y los empresarios.

Camioneros, con su histórico líder a la cabeza y su hijo Pablo de lugarteniente viene liderando los sindicatos, movimientos sociales, la Corriente Federal, las Regionales de la CGT con aval de la Iglesia que motorizan una huelga nacional. En la otra vereda, los más dialoguistas también se dividen en cuanto a la estimación para archivar la medida antes de decretarla o buscar recuperar terreno ante el reclamo federal de poner un tope a la política económica, que incluye despidos, suspensiones, la vuelta al FMI, tarifazos y demás.

En las últimas horas, el propio Hugo Moyano en diálogo con el programa Lo Dice Embón de Crónica HD, sostuvo que la situación solo daba lugar para el reclamo de los trabajadores, esperaba que se anunciara hoy la medida federal y acotó que a su criterio la misma "debía ser cumplida con movilización para expresar en el tono debido el malestar de los trabajadores".

En la cuestión, entre llamadas, silencios y egos también está en juego el predominio de moyanistas y anti moyanistas, incluso los que respetan a Camioneros pero no se desviven por demostrarlo. El paro, de concretarse, llegaría sobre las espaldas de ese sindicato. Si no llega a destino las organizaciones más dialoguistas podrían "lograr" algún beneficio para los trabajadores pero también haberle restado impacto a la movida de Camioneros.

Desde ese sector y sus aliados deslizaban anoche que sin oferta seria o mejores concretas, aún con la huelga postergada, la CGT se atomizará aún más y los sindicatos "combativos" seguirán enfrentando el modelo económico vigente.