Con sus ropas, algunas bolsas y miedo. Con lo que pudieron tomar de sus casas, con lo que les entraba, con desesperación. A diario, cientos de personas escapan de sus países en crisis y migran a Europa en busca de una vida mejor. El viernes pasado, cincuenta de ellos fueron filmados por una persona que se encontraba en la playa del Cañuelo, en Tarifa, provincia de Cádiz, España, cerca del mediodía.
Según lo publicado por el diario El País, entre los inmigrantes había incluso menores. Todos corrieron ni bien la embarcación precaria en la que llegaron tocó la arena y se dispersaron por la playa, ante la mirada de varios turistas que no supieron cómo reaccionar.
El servicio marítimo de España rescató a los migrantes de 12 barcos que fueron interceptados por la mañana en el Estrecho de Gibraltar. El operativo se dio luego de que el gobierno salvara a casi mil personas que intentaron realizar el peligroso viaje de África hasta las costas europeas el viernes y el sábado.
Ayer, el ministro de Interior español instó a hallar una "solución europea" al "problema de la inmigración". "Venimos aquí para ver sobre el terreno los problemas que existen, el problema de la inmigración, que es un problema de Europa, que necesita una solución europea", declaró ante la prensa Fernando Grande-Marlaska, del nuevo gobierno del socialista Pedro Sánchez.
Durante 2018, el país ibérico recibió a cerca de 20 mil personas que llegaron por mar. Más de 1500 personas fallecieron en lo que va del año intentando cruzar el Mediterráneo.
Fuente: La Nación / Agencias AP y AFP