La mesa de acción política del Partido Justicialista y autoridades del espacio, encabezadas por su presidente José Luis Gioja, se reunieron este jueves en su sede nacional para brindar su apoyo a la senadora Cristina de Kirchner, a quien consideran blanco de "hostigamientos" del juez federal Claudio Bonadio.
Gioja señaló que el Gobierno "usa a un sector de la Justicia para hostigar y perseguir a quienes hacen oposición en la Argentina".
"Necesitamos que se haga justicia, pero no queremos shows, que son como el elefante blanco sin ver el incendio" afirmó durante una conferencia de prensa que encabezó tras el encuentro.
En este sentido, explicó que lo que no le gusta al peronismo "es que el mismo juez (por Bonadio) se dedique a provocar a quien fue Presidenta de la República".
Luego de la reunión se difundió un documento orgánico en el que se hizo hincapié en un plan del Gobierno para "distraer al pueblo" respecto de la "crisis" que el PJ considera autoinfligida.
Según alertaron, el país enfrenta una "situación de extremo peligro" y "va camino a una crisis de proporciones", y advirtieron sobre la elevada inflación, la "presión tributaria" y la eliminación del Fondo Federal Solidario, una "clara medida de ajuste despiadado".
"Mientras estas cosas ocurren se distrae al pueblo con una novela con aires de burlesque, ocultando y mintiendo, cuando se impone conocer toda la verdad, pero ello supone respeto de la legalidad y el sometimiento a jueces naturales, imparciales y ajenos a enemistades manifiestas o intereses económicos y políticos, que persiguen la intención de algunos sectores judiciales y mediáticos de servir a estrategias geopolíticas dirigidas a proscribir y perseguir dirigentes políticos, sociales y sindicales de la oposición", denunciaron.
En este marco, remarcaron que "la Justicia debe investigar en el marco de la Constitución Nacional, sin atropellos ni shows, respetando las garantías y el debido proceso para todos los ciudadanos", y agregaron que "se está relajando el Estado de Derecho".
El peronismo buscó dar un mensaje de fortaleza y exhibió a los vicegobernadores de Tierra del Fuego, Juan Carlos Arcando; de Chaco, Daniel Capitanich; y de San Juan, Marcelo Lima; tres provincias que venían moviéndose en la órbita del Peronismo Federal y que ahora, tras el fin de la intervención, habrían saltado el cerco.