El dueño de El Teatrino de Salta, donde Alfredo Casero iba a presentarse, levantó la función después de escuchar al humorista cuestionar el trabajo de Abuelas de Plaza de Mayo en la búsqueda de los niños apropiados por la dictadura. Esta mañana contó a LT9 como fue la situación.

Humberto Colautti, nieto recuperado y dueño del teatro donde se iba a presentar Alfredo Casero, contó en Dame Radio que "no fue una decisión arbitraria, hace más de cuatro meses tenemos el show en cartelera y recibimos muchas amenazas en las redes sociales del teatro de grupos feministas, políticos, y hay un descargo porque nosotros no tenemos ideología partidaria en el teatro, hay artistas que han hecho monólogos, stand up, con todas las ideologías y nosotros no hacemos ningún tipo de discriminación".

"El representante del artista me preguntó hace un mes que se puede hacer por la agresividad de los comentarios en las redes sociales que afecta a la venta de entradas, y yo le respondí que nunca borramos ningún comentario de las redes, y le dije que quizás puede ser que acá en Salta la gente sabe que yo soy nieto recuperado y quizás sorprenda que yo lo traiga a Casero pero al show lo íbamos a hacer. Hace 15 días me llamó de nuevo diciendo que venía floja la venta y yo le contesté que iba a lograr mayor difusión del evento", agregó Colautti.

Más adelante sostuvo que "gente amiga me pasó las declaraciones en el programa de Fantino y cuando se metió con el trabajo de las Abuelas de Plaza de Mayo, cuando dudó de la identidad de los nietos restituidos, yo actualmente trabajo en la Red Nacional por la identidad y se lo que nos cuesta recuperar los nietos y lo que es la filiación genética, pasa por un juez, por un banco genético y es muy difícil todo para las familias que todavía no han recuperado a sus nietos, creo que fue una ignorancia total, así que yo decidí no recibirlo en mi casa porque el teatro es mi casa, así que preferí no traerlo, lo hablé con el representante y él me entendió, así que decidimos no traerlo".

Por último indicó que "los dichos tienen intencionalidad, pero hay un límite en el respeto a los demás, a una institución que jamás recibió plata de ningún gobierno, es un trabajo muy serio que nadie puede tomar libremente, lo más triste de todo eso es que es la primera vez que cancelamos un show y hay mucha gente detrás de una obra, no me parece correcto mentir así, no se si es por ignorancia, pero él tiene las puertas abiertas de Plaza de Mayo para que vaya a ver cada uno d elos nietos para ver cómo s erestituyeron, me parece que fue malintencionado".