El presidente brasileño, Michel Temer, ordenó el martes movilizar al ejército para proteger la frontera con Venezuela y anunció su intención de buscar apoyo internacional para enfrentar la crisis en ese país, que "amenaza la armonía" de América del Sur.
"Vamos a buscar el apoyo de la comunidad internacional para adoptar las medidas diplomáticas que resuelvan ese problema, que ya no es de política interna de un país, pero que avanzó por la frontera de varios países y amenaza la armonía de todo nuestro continente",afirmó Temer en una declaración televisiva desde el palacio presidencial de Planalto.
Por su parte, Colombia y Perú, los mayores receptores en Sudamérica de cientos de miles de inmigrantes que huyen de la crisis económica y social en la nación petrolera, acordaron crear una base de información conjunta para atender eficiente y ordenadamente al creciente fenómeno.
"Esta base de datos inicialmente va a operar con la información de Perú y Colombia. Ya hay países que han manifestado su interés en esta base, hemos invitado a Brasil y a Ecuador", dijo el martes en una conferencia de prensa el jefe de la autoridad migratoria colombiana, Christian Krüger, tras un encuentro de dos días en Bogotá con su par peruano.
En Colombia se encuentran actualmente cerca de un millón de venezolanos, mientras que en Perú la cifra asciende a unos 420.000. Los inmigrantes demandan alimentación, hospedaje, salud, educación y trabajo.