"Desde el Instituto entendemos que empezar a pensar en los baños mixtos como una política pública es un desafío que tenemos como sociedad y, en ese sentido, la decisión de esa universidad puede servir de modelo a seguir por otros organismos, como las escuelas, donde ya se registraron algunas experiencias.", establecieron.
En este sentido, destacaron que la instalación de baños mixtos "tiene que ser promovido por la legislación vigente, ante el convencimiento de que las categorías varón/ mujer, tal como fueron utilizadas desde el paradigma heteronormativo, ya no alcanzan para dar cuenta de todas las identidades y orientaciones sexuales disponibles en el entramado social."
El baño mixto o "sin género" funciona desde el 7 de agosto y está ubicado en la planta baja de la facultad, frente a la Biblioteca. El objetivo es que pueda ser utilizado por personas transexuales, padres con hijos y discapacitados que necesiten asistencia.