Al menos 50 personas murieron y 300 personas están desaparecidas luego de que una represa de contención de residuos de la minera Vale se derrumbara este viernes en el estado de Mina Gerais al sudeste de Brasil.
Hay temores de que el desastre, que desató una avalancha de lodo hacia la ciudad de Brumadinho y las tierras agrícolas circundantes, haga desaparecer el pueblo y cause un fuerte número de víctimas fatales.
El presidente Jair Bolsonaro visitará en las próximas horas la región afectada. En una entrevista con Radio Regional FM de Brumadinho, dijo que "lamentó profundamente" el colapso de la represa y que "posiblemente sea más serio de lo que se pensaba" porque podría haber arrastrado a los trabajadores de Vale.
Fuente: diario Perfil