El triunfo categórico de Sergio Uñac en las PASO de San Juan será un trampolín que le permitirá saltar de la provincia cuyana a la escena nacional con las credenciales del respaldo popular. El gobernador sanjuanino se quedó con más del 55%
de los votos en las primarias y utilizará ese apoyo masivo para mostrar, puertas adentro del peronismo, que puede ser un armador clave en el último tramo previo al cierre de listas o, eventualmente, un candidato a presidente o vicepresidente con aceptación de la gente y de los dirigentes.
En las elecciones de este domingo el mandatario le sacó más de 20 puntos de ventaja al candidato de Cambiemos, Marcelo Orrego, quien hizo un aceptable papel pero que, de cara a las elecciones generales del 2 de junio, quedó muy lejos de poder pelearle la gobernación a Uñac. No hubo enfrentamientos reales en las primarias, por eso los resultados fueron una encuesta adelantada de los comicios definitorios y un mensaje al gobierno nacional. El actual gobernador tiene el camino allanado para lograr la reelección y el oficialismo nacional deberá resignarse a una nueva derrota.
Diez días atrás Uñac reapareció en la escena nacional y dejó un mensaje sorpresivo sobre sus pretensiones en el corto plazo. "Banco a Lavagna y no sería un disparate ser su vice", dijo en una entrevista televisiva. La frase retumbó con fuerza en el peronismo y en el kirchnerismo. El sanjuanino se inclinó por la candidatura del ex ministro de Economía, que aún no confirmó su decisión pero que avanza en la construcción de su proyecto político. Además, dejó en claro que Cristina Kirchner no debería postularse nuevamente a la presidencia.
El gobernador de San Juan cree en la unidad del peronismo con el kirchnerismo, aunque prefiere no hacer de su idea un pedido público reiterado. Sin embargo, considera que la ex Presidente no debe ser candidata y que su ciclo al frente de la Argentina está terminado. Se lo ha dicho a los dirigentes que lo visitaron en San Juan y también a los intendentes bonaerenses con los que se reunió el año pasado. Está convencido que el tiempo de Cristina se terminó.
Fuente: Infobae