San Lorenzo dio un primer paso clave en su intento de repetir la enorme gesta conquistada en 2014: superó 2-0 en el Estadio Nuevo Gasómetro a Lanús por el partido de ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores.
El elenco conducido por Diego Aguirre consiguió una diferencia justa en el marcador y cierta tranquilidad en la definición. A pesar de las dudas que venía generando el juego del equipo, sacó a relucir la jerarquía que tiene en su plantel para triunfar ante un combinado que llegó de capa caída.
Nicolás Blandi fue el gran héroe de la noche, anotando los dos tantos del compromiso. El primero llegó cerca de la media hora de partido, cuando Juan Mercier colocó un excelente pase desde la mitad del campo y dejó en soledad al capitán. El atacante controló, hizo un enganche que dejó en el camino a Diego Braghieri y definió al gol.
Apenas arrancó el complemento José Luis Gómez le cedió el tanto al Ciclón con una falta insólita dentro del área. El joven lateral quiso salir jugando, Blandi le ganó la posición, lo tomó y el árbitro no dudó en pitar el penal. El propio delantero lo cambió por gol.
El primer paso está dado para el club de Boedo, que el próximo jueves 21 de septiembre deberá ir a La Fortaleza a justificar el resultado obtenido en la ida. El que gane esta llave enfrentará en semifinales al triunfador del duelo entre River y Jorge Wilstermann.