"Ustedes son actores fundamentales para pensar un modelo de desarrollo inclusivo", afirmó este jueves el gobernador Miguel Lifschitz al hablar ante los productores agropecuarios reunidos en la 105º asamblea anual de la Federación Agraria Argentina (FAA), que se llevó a cabo en el centro de eventos y convenciones Metropolitano en Rosario.
Argentina "necesita un modelo de desarrollo agropecuario. Un conjunto de políticas que piense el desarrollo integral del país, y que incluya leyes en defensa del pequeño y mediano productor".
Lifschitz, al explicar que Argentina carece de dicho modelo de desarrollo, puso como ejemplo que el Fondo Nacional de Emergencia es de 500 millones de pesos desde hace 15 años. "Eso no puede ser. Esa cifra podría equivaler a lo que necesita sólo Santa Fe por emergencia hídrica", sostuvo.
"Otro de los temas importantes es la inversión pública en obras de infraestructura", explicó Lifschitz. "Nosotros priorizamos en Santa Fe la infraestructura vial a fin de poder recuperar los 4.500 kilómetros de rutas pavimentadas. Hemos invertido en los últimos 20 años, 12.500 millones de pesos y esperamos llegar a los 20 mil a fin de año".
También destacó la creación del fondo de electrificación rural y además dijo que el gobierno provincial acompaña al sector ganadero subsidiando la tasa de remates de AFA (Agricultores Federados Argentinos).
El encuentro también contó con la presencia de la intendenta de Rosario, Mónica Fein; del ministro de la Producción de Santa Fe, Luis Contigiani; y del presidente de FAA, Omar Príncipe; además de dirigentes de la entidad agropecuaria de todo el país.
Lifschitz explicó que el próximo año seguramente lo encuentre defendiendo los intereses de la provincia desde otro lugar. "Voy a ir al Parlamento con toda la fuerza y pasión para retomar la agenda de Federación Agraria, la que inició alguna vez Humberto Volando".
Contigiani dio su compromiso al "insistir sobre la ley de lechería, con la creación del instituto lácteo, que achique la brecha entre productor y consumidor; con la creación de una ley de arrendamientos rurales; insistir en que el Estado juegue rol clave en los eventos biotecnológicos para la agricultura, desde un modelo público privado y, en este marco, impulsar la creación de una ley de semillas, y también comprometernos a trabajar por las economías regionales y luchar para que el Inta vuelva a salir a la cancha".