La psicóloga María Neme, especialista en psicología infantil, advirtió que “si no se conoce las consecuencias de lo que esos llamados producen, los adolescentes no pueden dimensionar los daños”.
Neme también pidió que “las familias no repriman, sino contengan y se muestren las consecuencias que generan”. Además, coincidió en que las redes sociales refuerzan y masifican comportamientos como estos.
Las llamadas telefónicas de falsas advertencias por colocación de artefactos explosivos en establecimientos educativos fueron una constante durante el ciclo lectivo 2017 y provocó la movilización de dependencias estatales para aplicar el protocolo que exige la evacuación y revisión de los mismos por parte de especialistas en seguridad.