A principios de febrero, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) aprobó el misoprostol producido por el Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF) de la provincia de Santa Fe, por lo que está en condiciones de proveer al resto del país el producto.
"Es un orgullo para nuestro laboratorio haber obtenido este certificado de Anmat. Antes de esto, el misoprostol se entregaba gratuitamente en el sistema de salud pública de toda la provincia. A partir de ahora lo que podemos garantizar es la distribución federal a todo el territorio argentino", sostuvo en diálogo con Primera Mañana una de las directoras del LIF, Analía San Román.
El medicamento que se usa para realizar interrupciones legales de embarazo, forma parte de una cartera de 40 productos que fabrica el organismo para distribuir en los efectores públicos de salud.
"Ahora se inicia una serie de procesos administrativos, de licitaciones y contrataciones. Esto va a ocurrir a nivel nacional. Después pueden hacerse convenios comerciales con provincias puntuales. Hasta el año pasado proveíamos de misoprostol a la provincia de Buenos Aires, además de Santa Fe", sostuvo.
Una de las principales ventajas con la aprobación de Anmat es el precio respecto a laboratorios privados. "En el caso del misoprostol la diferencia es notoria, de la mitad. Y teniendo en cuenta que con la ley este medicamento debe asegurarse de forma gratuita. Es un importante avance en la soberanía sanitaria en cuento a la producción pública. De esta forma el Estado puede garantizar la accesibilidad", completó la bioquímica.
Para poder elaborarlo, "hicimos una transferencia tecnológica y el escalado a planta para que pueda producirse y controlarse íntegramente dentro del LIF, al igual que el alcohol en gel y el repelente que no se producían aquí", destacó.
Alcohol en gel y repelente
Otras de las producciones del LIF están relacionadas a la pandemia y el dengue. "Desde que asumimos la gestión, el año pasado el gobernador Perotti hizo especial hincapié en la producción dentro del LIF. Hay especialidades que se producen en forma asociada y a partir de que asumimos pusimos el foco en producir acá", sostuvo la directora.
"En marzo cuando la pandemia fue notoria empezamos con la producción de alcohol en gel, enseguida pudimos dar una respuesta de abastecimiento porque en ese momento era muy difícil conseguirlo. Y en febrero, en una visita del gobernador, cuando lo crucial era el dengue, él nos pidió que por favor pusiéramos especial énfasis en la producción de repelente. Empezamos con el desarrollo y en octubre pudimos estar entregando este insumo esencial en la lucha contra el dengue", concluyó.
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