Un polo gremial opositor a las reformas impulsadas por el Gobierno, comenzó a tomar forma entre los sindicatos agrupados en la Corriente Federal de Trabajadores (CFT), que lidera el bancario Sergio Palazzo y las organizaciones que responden al dirigente camionero y de la CGT, Pablo Moyano, quienes rechazaron de plano los cambios laborales y previsionales oficiales.
Moyano se distanció de sus pares del consejo directivo de la CGT y ratificó que las organizaciones gremiales opositoras y los movimientos sociales se movilizarán de forma masiva hacia el congreso "el día que el Senado comience a debatir la reforma laboral en el recinto", porque es contraria al interés de "los trabajadores".
Moyano procura fortalecer un polo de rechazo a las medidas laborales, previsionales e impositivas del Gobierno y, en ese sentido, en los últimos tiempos tejió lazos con los sindicatos de la Corriente Federal, en especial con la Asociación Bancaria de Sergio Palazzo, el más férreo opositor a las políticas diseñadas por el Ejecutivo.