La Organización Mundial de la Salud instituyó el 14 de marzo como el "Día de la Endometriosis" y “Mes Amarillo” para concientizar y visibilizar esta enfermedadque afecta a un porcentaje de la población femenina a nivel mundial y que altera la calidad de vida de las personas que la padecen. Hoy el Puente Colgante se teñirá de amarillo como símbolo para la concientización.
¿Qué es la Endometriosis?
La Sociedad Argentina de Endometriosis explica esta enfermedad:
El tejido que tapiza el interior del útero se denomina endometrio. En condiciones normales, sólo debe encontrarse dentro del útero, pero cuando dicho tejido se ubica por fuera de la cavidad uterina se denomina endometriosis. En la mayoría de los casos, este tejido alterado se ubica en los órganos genitales femeninos (útero, ovarios, ligamentos y órganos vecinos en la pelvis), pero también se ha detectado endometriosis en otros tejidos y órganos como cicatrices de cesáreas, pulmones, nariz, cerebro, entre otros.
La endometriosis es una enfermedad ginecológica benigna, que básicamente afecta a toda mujer en edad reproductiva. Se estima que entre un 6 y 10% de la población femenina, con una edad promedio al momento del diagnóstico de 28 años puede padecer endometriosis. Se calcula que 170 millones de mujeres la padecen, es decir 1 de cada 10. Hasta la fecha no se conoce la causa de esta enfermedad. Las teorías e hipótesis son numerosas y diversas, lo que medicamente se denomina enfermedad multifactorial. Aún la medicina no ha podido revelar de forma certera la causa de la endometriosis.
Los síntomas más frecuentes son menstruaciones dolorosas llegando a ser invalidantes en algunos casos. Por esta razón, la calidad de vida se va deteriorando con el tiempo, ya que es una enfermedad inflamatoria y crónica. Aproximadamente, un 40% de mujeres que durante años se encuentran en la búsqueda de un embarazo y no lo logran, se les diagnostica endometriosis. En la conciencia generalizada de la mayoría de las mujeres se considera que “la menstruación dolorosa es normal”. Esta subestimación, en muchas oportunidades, silencia los síntomas de la endometriosis y retrasa su diagnóstico.