Luego de la derrota 1-0 ante Huracán, la barrabrava de Vélez increpó al plantel en la Villa Olímpica. Un grupo de hinchas interceptó a varios jugadores y los agredió, incluso a los más jóvenes del equipo.
El Fortín vive una crisis futbolística e institucional, que se profundizó este domingo. Una vez consumada la caída en Parque Patricios, el conjunto dirigido por Sebastián Méndez quedó apenas dos puntos por encima de Huracán y Colón, quienes están en el último puesto en la lucha por la permanencia. Algunas horas más tarde, cuando los futbolistas se retiraban del campo deportivo, algunos hombres los detuvieron para recriminarles por la situación actual.
Ahí mismo, esta facción de la barrabrava de Vélez golpeó a algunos jugadores. Según informó el Diario Olé, entre las principales víctimas estuvieron los más chicos de un plantel que cuenta con pocos hombres de experiencia y muchos pibes.
El periodista partidario Gianluca Poggi detalló que después de lo ocurrido, algunos futbolistas pidieron irse del club: entre ellos se destaca Gianluca Prestianni, la joya de las inferiores, y Juan Ignacio Méndez, el volante proveniente de San Lorenzo.
Agustín Palacios fue uno de los primeros periodistas partidarios que dio a conocer la palabra de uno de los jugadores agredidos. Se trata del experimentado defensor Leonardo Jara, de 32 años, quien detalló la repudiable agresión sufrida fuera de la Villa Olímpica. ”Me cruzaron un auto, me agarraron de la campera, querían que me baje y me iban a pegar un par de tiros en las patas”, escribió el productor del programa radial Vélez a Fondo.
Y agregó: “Asegura haber visto a los agresores “al menos 7 veces en el predio en el último mes” y que, por otra parte, habrían agredido al personal de seguridad para ingresar por la fuerza a la Villa Olímpica”.
A propósito de esta gravísima agresión, el entrenador Sebastián Méndez les habría manifestado a los dirigentes que hasta que no garanticen la seguridad en la Villa Olímpica el plantel no volverá a entrenarse. En tanto, en lo estrictamente futbolístico, el Gallego fue muy crítico por el desempeño ante Huracán: “En estos partidos el equipo retrocedió. No jugamos hoy con Huracán el partido que teníamos pensado porque nos llevó por delante. Estoy enojado porque no disputamos el partido como lo debíamos disputar. Estos encuentros se juegan a muerte y nosotros no lo hicimos”.
No es la primera vez que ocurre un hecho semejante. En mayo de este año, la barra se metió a la fuerza en la Villa Olímpica y también apretó al plantel. En aquella oportunidad rompieron la barrera y fueron a buscar a los referentes del equipo. Cuando todavía dirigía Ricardo Gareca, los hinchas habían pedido mayor compromiso ante la complicada situación.
Con ciertas similitudes a esta ocasión, en aquella oportunidad 12 integrantes de “La Pandilla de Liniers” se acercaron en tres autos e irrumpieron en el predio de Ituzaingó.