Tenía 22 años, apenas más de 50 partidos como profesional y solamente faltaban nueve meses para el Mundial de Sudáfrica cuando Diego Maradona, entonces entrenador del seleccionado nacional, consideró que Sergio Romero calzaba los guantes que necesitaba la Argentina. La previsión del astro fue acertada, tanto que Chiquito se transformó, con 94 presencias, en el arquero con más partidos en la historia del seleccionado. En todo este tiempo, las dudas sobre el jugador formado en Racing giraron alrededor de la falta de continuidad en los equipos en los que juega. Sin embargo, en la selección nunca pareció dar cuenta de esa inactividad de los fines de semana.

En la gira de la copa del mundo organizada por Coca-Cola, en La Rural, hablaron dos de las voces más autorizadas para hablar del arco de la Argentina: Ubaldo Matildo Fillol y Nery Alberto Pumpido. Campeones del mundo en 1978 y 1986 (y compañeros de plantel en 1982), con todo lo que eso significa. Ambos participaron en tres Copas del Mundo, marca que ahora igualará Romero. "Después de Messi, el puesto del arquero es el que más tranquilidad me genera. Romero no solo atajó bien en el Mundial de Brasil, sino que también lo hizo en la mayoría de los partidos", analiza Pumpido. "Esa posición nunca sembró dudas ni preocupación. Sampaoli, desde mi humilde opinión, debería mantener a los tres que ya tiene en mente", indica Fillol.

La falta de continuidad de los arqueros argentinos en sus clubes no representa una dificultad a la hora de defender los tres palos albicelestes, advierte Pumpido. "Desde hace ocho años se habla del tema y yo no recuerdo errores groseros de Romero. Chiquito es quien más partidos atajó en el seleccionado, el que más minutos jugó, tiene una experiencia bárbara", considera. Y avanza con dos ejemplos puntuales: "Alberto Tarantini era un jugador libre en el Mundial de 1978 y sin embargo fue campeón del mundo. Y más adelante pasó lo mismo con el Tata Brown en 1986".

Los dos arqueros titulares campeones del mundo con la Argentina confían en la base actual e inclusive se atreven a mirar hacia adelante, con la mente en el Mundial de Qatar 2022. "Tenemos a Romero, Guzmán, Marchesín, Caballero. Y si querés pensar a futuro contás con Rulli, un chico muy joven. Menotti hizo lo mismo en 1982, yo fui para adquirir experiencia", asegura Pumpido. "Mucha gente hoy habla de cambios y yo no estoy de acuerdo porque sería muy sobre la marcha y faltando muy poco. Se trabajó con esta base y hay que sostenerla", remarca Fillol.

Fuente: La Nación