Este sábado, Susana Beatriz Montoya fue asesinada en Córdoba. Su hijo, Fernando Albareda -militante de la agrupación de derechos Humanos HIJOS- recibió meses atrás, fuertes amenazas contra su familia y fue quien encontró el cuerpo de su madre en el patio de su casa.
Fernando es hijo del subcomisario Ricardo Fermín Albareda, torturado y asesinado en la dictadura, aún hoy desaparecido. En diciembre del año pasado, el frente de su casa había aparecido repleto de carteles con amenazas: “Se te terminaron los amigos en la Policía”, “te vamos a juntar con tu papito”, “vas a morir".
Por el momento, la familia todavía aguarda los resultados de la autopsia, aunque desde la investigación informaron que la mujer de 74 años presentaba signos de haber sido asesinada ya que sufrió un golpe en la cabeza y un corte que podría haber sido provocado por un ladrillo o un cascote pesado.
Fernando aseguró que en una pared de la casa encontró una pintada en la pared con una nueva amenaza escrita con lápiz labial que decía: "Los vamos a matar a todos. Ahora vamos por tus hijos. Policía".
"Sólo atiné a llamar a la Policía. Salté la tapia de la casa vecina y vi que estaba muerta, ya morada" contó a la prensa. En el caso interviene el fiscal del Distrito 4, Turno 3, Juan Pablo Klinger.
En cuanto a los mensajes previos, sostuvo: "Yo recibo amenazas todos los meses. Nunca les dí bola. Pero ahora parece que han vuelto, que están rompiendo todos los códigos”, sostuvo.