Fue en rechazo a la violencia de género y a la corrupción judicial revelada en los llamados ‘Audios de la vergüenza‘.
La movilización partió a las 4 p.m. desde el parque Washington en el Centro de Lima. La ruta siguió por las avenidas Arequipa, Javier Prado, Paseo Parodi, Andrés Reyes, Rivera Navarrete y Juan de Arona.
Llegó pasadas las 6 p.m. hasta la sede del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM). En la marcha, participó Cindy Arlette Contreras, quien fue agredida por su expareja Adriano Pozo Arias al interior de un hospedaje en la ciudad de Ayacucho en 2015.
“Las mujeres debemos seguir luchando y lo estamos haciendo. Estamos demostrando a estos operadores de justicia indolentes que somos fuertes, somos valientes, y vamos a seguir saliendo a tomar las calles para exigir que cumplan su trabajo”, dijo la joven a RPP.
Ana María Vidal, secretaria adjunta de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, informó que en esta oportunidad la marcha exigió cambios en el sistema judicial a raíz de los casos de corrupción que involucran a miembros del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) y Poder Judicial.
“Desde hace dos años, cuando salimos a gritar del dolor porque no aguantábamos más que nos estén matando, violentando y violando, nadie hace nada. Ahora tenemos las pruebas, sabemos que el sistema de justicia dejaba que todo pasara como si nada”, subrayó en declaraciones a la prensa.
Por ello, la meta de la protesta era culminar frente a la sede del CNM en San Isidro, cuyos funcionarios protagonizan los audios que revelaron una presunta red de tráfico de influencias en el sistema de administración de justicia en el país. (Nodalam.com)