El presidente estadounidense, Donald Trump, ha acusado a su exabogado Michael Cohen, quien se ha declarado culpable de haber violado normas de financiación de campañas electorales, de «inventar historias» para lograr una condena menor.
«La 'Justicia' tomó un caso de impuestos de hace 12 años, entre otras cosas, aplicó una tremenda presión sobre él (Paul Manafort, su exjefe de campaña) y al revés que Michael Cohen, rehusó 'derrumbarse' -inventar historias para lograr un 'pacto'», afirmó Trump en un mensaje en su cuenta de Twitter. «¡Gran respeto por un gran hombre!», agregó.
El mandatario comparaba así los casos de Manafort, que también el martes fue declarado culpable de cargos de evasión fiscal y fraude bancario, y de Cohen, quien admitió su culpabilidad en ocho cargos, incluidos dos deviolación de la ley federal de financiación de campaña. En tono irónico, el gobernante republicano también escribió que «¡si alguien está buscando a un buen abogado, le sugeriría con contundencia que no contratase los servicios de Michael Cohen!».
Estos son los primeros comentarios de Trump en las redes sociales, su medio preferido de comunicación, respecto al veredicto de culpabilidad de Manafort y el acuerdo de culpabilidad alcanzado por Cohen, ambos este martes en distintos tribunales.
Cohen, que se entregó ayer al FBI y compareció poco después en Nueva York ante un juez federal para declararse culpable, reconoció haber gestionado antes de las elecciones dos pagos a mujeres que aseguraban haber mantenido relaciones con el entonces candidato republicano a la Presidencia. Esos pagos podrían violar las leyes sobre financiación electoral si se considerasen un aporte ilegal a la campaña de Trump, a quien pudieran salpicar en caso de demostrarse que él estaba al tanto.
En concreto, el exabogado ha reconocido los pagos efectuados a la exactriz porno Stephanie Clifford, conocida por el seudónimo de Stormy Daniels, y a la modelo Karen McDougal, con las que el magnate neoyorquino habría mantenido relaciones en 2006 y 2007. A cambio de su silencio, Clifford supuestamente recibió 130.000 dólares y McDougal 150.000.
El abogado aseguró que actuó «bajo dirección del candidato» y «con el objetivo principal de influir en las elecciones» implicando explícitamente a Trump en esos posibles delitos. «Michael Cohen se ha declarado culpable de dos cargos de violación de financiación de campañas que no son un delito. El presidente (Barack) Obama cometió una gran violación y se resolvió fácilmente», ha asegurado Trump, que de esta forma se opone al criterio del Departamento de Justicia.
Cohen admitió, además, ser culpable de ocho cargos, que incluyen evasión fiscal y fraude bancario, y que podrían enviarle a prisión durante años.
El abogado de Cohen, Lanny Davis, ha asegurado que su cliente estaría «más que feliz» de contar al equipo del fiscal especial Robert Mueller, que investiga la presunta injerencia electoral de Rusia, todo lo que sabe sobre Trump. Davis también ha aprovechado para sembrar la duda sobre el presidente: «Si los pagos fueron un delito para Michael Cohen, ¿por qué no lo serían para Donald Trump?».
Uno de los debates abiertos en las últimas horas en los medios de comunicación norteamericanos pasa por la posibilidad de que Trump indulte a su exabogado, algo que Davis ha querido dejar claro que no ocurrirá. «No solo (Cohen) no lo espera, sino que no lo aceptaría», ha advertido Davis este miércoles en una entrevista a (NBC).