"Si alguien lanza piedras o rocas -como hicieron en México- se les podrá disparar, porque si te dan con una piedra en la cara, eso fue bastante violento, realmente fue entrar a la fuerza", apuntó Trump durante una comparecencia en la Casa Blanca.
El director de Servicios y Abogacía de Casa, George Escobar explicó que el ejército norteamericano tiene prohibido actuar contra personas en la frontera. El pasado 19 de octubre, seis policías acabaron lesionados cuando las cerca de 3.000 personas que por entonces integraban la caravana tiraron abajo una valla fronteriza que les impedía el paso, aunque las autoridades informaron de que las agresiones, con petardos y piedras, fueron llevadas a cabo por "personas ajenas a la propia caravana".
Las palabras de Trump se producen días después de que el Gobierno de EE.UU. anunciará el envío de 5.239 soldados regulares al linde con su vecino del sur; una cifra que, como señaló el miércoles el propio presidente, podría llegar hasta los 15.000 militares.
"Nuestro Ejército se hará cargo", aseguró el mandatario, quien defendió la necesidad de recurrir a las Fuerzas Armadas debido a que las dos caravanas que avanzan desde México hacía el norte "está formada por gente muy dura".
"Hasta México dijo que era gente dura. No les quieren en su país", armó Trump, quien tan solo unos minutos antes había puesto en duda que esos migrantes abandonaran sus países por miedo, ya que, subrayó, las autoridades mexicanas les habían ofrecido "asilo y trabajo" y lo habían rechazado. "Emplearé todos los recursos a mi alcance para acabar con esta crisis (...). Debemos acabar el trabajo que empezamos, debemos ser duros", advirtió. (EFE)