El papa y el gran imán de Al Azhar condenaron juntos el lunes toda discriminación contra las minorías religiosas y llamaron a la fraternidad, en el segundo día de una visita histórica a la península arábica golpeada por los conflictos y las desigualdades.
Todo el día, el Papa, vestido de blanco, así como el gran imán sunita del instituto egipcio Al Azhar, el jeque Ahmed al-Tayeb, de negro, se mostraron juntos de manera fraterna.
Estuvieron frente a la gran Mezquita Zayed --una de las más grandes del planeta-- y luego se besaron en la tribuna de la conferencia interreligiosa, bañada por una lluvia de hojas de olivo.
Este encuentro y diálogo interreligioso había sido impulsado por el papa y el gran imán de Al Azhar, institución más importante del islam sunita.