La tasa promedio de las Letras de Liquidez ( Leliq) volvió a subir ayer y se pactó a un promedio de 50,065 por ciento, en una jornada en la cual el Banco Central de la República Argentina (BCRA) adjudicó a 9 días de plazo por $160.000 millones. Esa decisión de la autoridad monetaria terminó de definir la suerte del Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), donde el dólar cedió casi 20 centavos y se ubicó en $ 38,95. El mayorista recortó 17 centavos, finalizó a $38,87 y se encaminó al piso de la zona de no intervención.
En la licitación de ayer la entidad adjudicó un monto que se ubicó por debajo de los vencimientos, generando una expansión monetaria ya que de los $180.000 millones de Leliqs que vencían adjudicó $160.000 millones, con lo que se produjo un efecto de expansión monetaria.
En la colocación convalidó una tasa máxima de 50.4921 por ciento, una mínima de 48 por ciento, dando una tasa promedio de 50,065 por ciento.
La tasa sube desde el 14 de febrero cuando se marcó un piso de 43,937 por ciento, aunque el máximo el máximo del mercado se convalidó en octubre pasado cuando superó el 73 por ciento. "El stock de Leliqs bajó $20.000 millones y el nuevo saldo es de $ 883.230 millones", indicó el economista Christian Buteler.
La banda cambiaria se ubicó ayer en niveles mínimos de $38,56 y máximos de $49,90 de acuerdo al esquema planteado en la política monetaria definida en septiembre pasado por el Banco Central.
"No se vio la típica demanda de fin de mes, que aparentemente adelantaron los pagos la semana pasada cuando llegó a tocar un máximo de $40,55" indicó Fernando Izzo, analista de ABC Mercado de Cambios.
El especialista agregó que "la oferta la exportación sigue en torno a u$s 60 millones diarios" y precisó que las ventas fueron más "por el lado de los inversores".
En el mercado de dinero entre bancos el call money se operó estable a un promedio del 45 por ciento.
El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, explicó en la noche del lunes que "las tasas de interés del BCRA remuneran las Leliq que suscriben los bancos" y que generan "un nivel determinado del rendimiento de los plazos fijos que es unos diez puntos más bajo que las del BCRA".
"La Argentina todavía tiene inflación y si bien las tasas son positivas en términos reales, la contracara es una mayor estabilidad cambiaria y entonces la posibilidad de que la inflación mantenga este ritmo descendiente, y estamos convencidos de que este año vamos a tener una inflación mucho más baja que la que tuvimos en el año 2018", agregó el funcionario.
Dujovne aseguró que "manteniendo esta política monetaria en donde se ha hecho el mayor ajuste de servicios públicos" y con un tipo de cambio, controlado "las chances de que la inflación en 2020 muestre otro descenso sostenido respecto a la inflación de 2019, están ahí".
"Argentina va a poder hacer lo que hicieron nuestros vecinos de llegar a tasas de inflación de un dígito pero sin atajos", aseguró.
Por otra parte, el S&P Merval cerró ayer con una caída del 0,8 por ciento y su principal índice bursátil se ubicó en los 36.026 puntos, recuperándose de las pérdidas aún mayores registradas en el inicio de la rueda.
Ferreres: la actividad cayó 5,8 por ciento
El nivel general de actividad cayó 5,9 por ciento anual en enero y acumuló 10 meses de bajas consecutivas, según la consultora Orlando Ferreres y Asociados. El informe agrega que, en términos desestacionalizados, enero registró una suba mensual del 0,25 por ciento.
Respecto a la medición interanual, los resultados positivos están asociados casi exclusivamente al sector agropecuario, que creció 7,6 por ciento interanual de la mano de la mejora en las cosechas de trigo, maíz y girasol. El otro sector que subió fue minas y canteras: 2,2 por ciento.
El principal lastre para la actividad económica provino del desempeño industrial, que tuvo una caída del 8,3 por ciento, mientras que el segmento comercial cayó 8 por ciento respecto a enero del año pasado, sumamente influenciada por la dinámica de la rama mayorista (-11,2 por ciento ). El rubro de electricidad, gas y agua se contrajo en enero 3,1 por ciento interanual, influenciado por el mal desempeño de la generación eléctrica. Justamente, ese item cedió 8 por ciento en relación a enero de 2018, arrastrada por la menor generación térmica, que cayó 9,4 por ciento.
Fuente: La Capital