Este sábado el sacerdote, músico, compositor y reconocido trabajador social Osvaldo Catena cumpliría 99 años. Con este marco, en el barrio Villa del Parque se realizaron diversas actividades para recordar al padre Catena, como es conocido popularmente. 

Entre estas se destacan la inauguración de una sede de la Fundación Padre Catena en ese barrio del cordón oeste de la ciudad de Santa Fe que albergará y dará contención a personas de la tercera edad.

"Hemos organizado un lindo cumpleaños. Además la Fundación inauguró su sede que va a ser un hogar de ancianos de Villa del Parque. El sábado se realizará la misa central a las 18 horas en la capilla del barrio", informó Nilda Libertini, directora de la escuela Cristo Obrero en el móvil de LT9.

"Acá funciona una red de instituciones que trabaja por el prógimo. Eso es lo que ha sembrado él, ha transformado conciencias", agregó.

Además, hacia el final de la jornada de este viernes se presentó la cantante Itatí Barrionuevo interpretando las canciones del padre.

La vida del Padre Catena

Osvaldo, nació en la localidad santafesina de Mariano Saavedra el 13 de abril de 1920. 

Hijo de una familia humilde de origen piamontés (Don Serafín y Doña Enriqueta), solía enumerar los trabajos que realizó durante su infancia para ayudar a sus padres; entre ellos, repartir pan en las chacras. 

Según cuenta su hermano Luis, Osvaldo era un alumno ejemplar en la escuela del pueblo, por eso, al terminar la Primaria, el maestro le ofreció enseñar en los grados inferiores. 

Sin embargo, él eligió, en ese momento, ser sacerdote. Y así, a los 13 años, entró en el Seminario de Guadalupe, gracias a la ayuda económica del Padre Rotta, Párroco de San Vicente. 

La resonancia social de su figura no necesita demasiada explicitación, sin embargo, enumeramos algunas de sus numerosas actuaciones, que hicieron del él una figura “pública” en el mejor sentido de esta palabra.

Perito en liturgia participó como asesor en esa área, del Concilio Vaticano II. Una vez de regreso en el país, dedicó gran parte de sus energías en producir una renovación de las formas del culto, tratando de integrar la liturgia a la vida. Lo hizo, sobre todo, a través del canto, y en ese camino, algunos hitos fundamentales:

• La organización de la escuela de Música Sagrada ( Santa Fe ).
• La fundación del Coro “Los cantores de Cristo Obrero“. ( Santa Fe)
• La organización del grupo de música litúrgica “Pueblo de Dios“ ( a nivel nacional), que aún después de más de doce años de su muerte, sigue creando y difundiendo la obra del Padre Catena.
• Asesoró al músico Ariel Ramírez en la elaboración de la “Misa criolla“ y en la “Misa por la Paz y la Justicia” ; si bien su trabajo no figura oficialmente en estas obras, fue reconocida públicamente por Ramírez, en más de una ocasión, su valiosa colaboración.
• Autor de varios cancioneros litúrgicos ( “Gloria al Señor” , “Cien Salmos para cantar “, entre otros ), recopilación de su fructífera labor como compositor original y compilador de música y poetas populares o cultos.
• Como músico y hombre de fe, comprometido con el hombre mismo, integró el Instituto de Música de la U.N.L. y participó en su renovación.
• Autor o coautor de varios libros, entre ellos, un comentario sobre los Evangelios: “Jesús, nuestro Salvador”.
• Fundador y “alma mater “ del Movimiento Familiar Cristiano en Santa Fe, que dejó profundas huellas en una generación de santafesinos.
• Capellán del Colegio “Ntra. Sra. del Calvario“ por muchos años, dio a la educación que se impartía en esta Institución, una óptica de compromiso con la realidad que, aún hoy, impera entre sus ex- alumnas.
• Desde su compromiso con los pobres, vivido sin discursos, pero de una manera total, habitó una precaria vivienda de Villa del Parque desde 1968 hasta 1974; en ese lapso organizó y contribuyó a hacer crecer todas las instituciones de servicio de que hoy disponen los vecinos: Asociación Vecinal; Guardería Infantil; Dispensario; Escuela Primaria y Escuela Técnica.

Un sueño que tenía, y que las circunstancias le impidieron concretar, era el de una casa en la que los ancianos sin familia pudieran ser atendidos; cumplir este sueño es uno de los objetivos de la Fundación que lleva su nombre y que finalmente se concretó este viernes.

La sociedad santafesina en general se hizo eco de la resonancia de esta figura de Pastor, de músico, de hombre comprometido con el momento de la historia que le tocó vivir. Por eso, el Concejo Municipal votó una ordenanza ( Ordenanza N° 9436 del 7 de noviembre de 1991), cambiando el nombre de la calle principal de Villa del Parque (Pasaje Echevarría) , en la que se ubican las Escuelas, la Parroquia y la Guardería, por el de “Padre Osvaldo Catena“.

En octubre de 1974, por las circunstancias dolorosas que vivía nuestra patria y nuestra ciudad en aquel momento, el Padre Catena debió dejar Santa Fe. Llamado por el entonces Obispo de Azul, Monseñor Manuel Marengo, se trasladó a Benito Juárez (Provincia de Buenos Aires), donde se desempeñó como párroco de la Iglesia “Ntra. Sra. del Carmen“. Desde allí desarrolló, también una intensa labor pastoral. Prosiguió con su trabajo de liturgista, pero también se preocupó por lo problemas religiosos y sociales de la zona. 

Con la ayuda de la sociedad de B. Juárez, que reconoció en él a un verdadero profeta, fundó doce capillas, construyó un barrio completo para personas o matrimonios solos; inauguró casitas para matrimonios con varios hijos y sin vivienda propia (a quienes se las cede en comodato hasta que el hijo menor finalice sus estudios secundarios), entre otras obras. 

Hasta su muerte, el 29 de noviembre de 1986, desarrolló en esa ciudad un fecundo trabajo, reconocido por el pueblo, lo que se verificó, no sólo en su entierro, que produjo la paralización total de las actividades deportivas, sociales y comerciales de la zona, sino también en los homenajes y el cariño que la gente le sigue demostrando aún hoy en su tumba, situada en el interior del templo parroquial.

Con información del portal de ATE